El desv¨ªo de fondos a la 'contra' surgi¨® de un amplio programa de ayuda encubierta al anticomunismo
NYT Los tratos clandestinos de la Administraci¨®n de Ronald Reagan con Ir¨¢n y con la contra nicarag¨¹ense salieron de un programa bien disimulado y establecido hace al menos cuatro a?os en las Casa Blanca para llevar a cabo diversas iniciativas encubiertas de pol¨ªtica exterior, seg¨²n varios funcionarios del Gobierno. El llamado Proyecto Democracia comenz¨® como la cara secreta de lo que era una iniciativa abierta y p¨²blica que naci¨® con el mismo nombre.
La dimensi¨®n encubierta del Proyecto Democracia estaba pensada para llevar a cabo misiones de pol¨ªtica exterior que otras agencias gubernamentales no pod¨ªan o no quer¨ªan desarrollar, dijeron los funcionarios. Aunque la rama p¨²blica del Proyecto Democracia, ahora conocido como Dotaci¨®n Nacional para la Democracia, otorg¨® abiertamente dinero federal para Instituciones democr¨¢ticas en el extranjero y recibi¨® un amplio apoyo por parte de: los republicanos y de los dem¨®cratas, los citados funcionarios dijeron que la rama secreta del proyecto se orient¨® en una direcci¨®n totalmente diferente despu¨¦s de que fuera nombrado para encabezarlo, hace tres a?os, el teniente coronel Oliver North, entonces un oscuro aseser en el Consejo de Seguridad Nacional (NSC).En 1986, el Proyecto Democracia se hab¨ªa convertido en lo que Oille [Northl llamaba el proyecto paraguas, para apoyar ciertas cosas", explica un funcionario bien situado de la Casa Blanca. Como resultado, ahora parece que fue la visi¨®n del presidente Reagan de cultivar las "fr¨¢giles flores de la democracia", como describi¨® el Proyecto Democracia en un discurso en 1982, lo que llev¨® al NSC a dirigir operaciones secretas desde la Casa Blanca. Culmin¨® en el actual esc¨¢ndalo sobre la venta de armas a Ir¨¢n y el desv¨ªo de los beneficios hacia los rebeldes nicarag¨¹enses.
En los ¨²ltimos cuatro a?os, el Proyecto Democracia creci¨® y se convirti¨® en un aparato paralelo de la pol¨ªtica exterior norteamericana, con sus propios sistemas de comunicaci¨®n, enviados secretos, barcos y aviones alquilados, cuentas bancarias en el extranjero e incluso la propiedad de algunas corporaciones.
Operaba al margen del proceso establecido de toma de decisiones en el Gobierno y fuera de la supervisi¨®n del Congreso, y era, seg¨²n los funcionarios, una expresi¨®n de la profunda frustraci¨®n de la Administraci¨®n de Reagan que no lograba convencer a la burocracia de la pol¨ªtica exterior ni al Congreso de que abrazase la doctrina Reagan de apoyo a las insurgencias anticomunistas en todo el mundo.
Amplia gama
Miembros de la comisi¨®n parlamentaria que investiga el esc¨¢ndalo Irangate dicen que est¨¢n encontrando referencias al Proyecto Democracia diseminadas a trav¨¦s de los documentos del NSC a los que han tenido acceso. Y el panel especial de la Casa Blanca que investiga el funcionamiento del NSC -la Comisi¨®n Tower- ha estado interrogando a testigos sobre el Proyecto Democracia y ha descubierto que llevaba a cabo una amplia gama de actividades secretas a¨²n no conocidas por el p¨²blico, seg¨²n fuentes familiarizadas con esta comisi¨®n.
Pero los investigadores dicen que a¨²n no conocen el pleno alcance de las actividades llevadas a cabo bajo el nombre del Proyecto Democracia. Aunque las partes abierta y secreta del proyecto nacieron como mellizas en 1982, se desarrollaron en direcciones tan divergentes que hoy d¨ªa muchos funcionarios se preguntan si estuvieron alguna vez relacionadas.
Mientras la rama p¨²blica del proyecto, la Dotaci¨®n Nacional para la Democracia, estuvo otorgando abiertamente el a?o pasado dinero federal a edito res, sindicatos y otras instituciones del extranjero, la rama secreta, bajo la direcci¨®n de North, estuvo enviando ayuda encubierta y recaudada de forma privada a la contra y llevando a cabo toda una gama de actividades de lo mas diverso.
Incluso algunos de los colegas de North en el NSC desconoc¨ªan el programa secreto. Cuando algunos funcionarios del NSC o¨ªan o le¨ªan referencias al Proyecto Democracia, conclu¨ªan que era s¨®lo el "nombre en clave que North utilizaba para sus actividades", seg¨²n uno de estos funcionarios.
El Congreso accedi¨® en 1983 a financiar el programa p¨²blico despu¨¦s de que William Casey, entonces director de la Agencia Central de Inteligencia (CIA) prometiera que su organizaci¨®n no participar¨ªa en ¨¦l. La CIA no llev¨® el proyecto porque algunos funcionarios hab¨ªan decidido controlar su faceta encubierta desde el NSC.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.
Archivado En
- Nicaragua
- Tr¨¢fico armas
- Oliver North
- Venta armas
- Caso Ir¨¢n-Contra
- Comunismo
- Estados Unidos
- Pol¨ªtica exterior
- Centroam¨¦rica
- Orden p¨²blico
- Ir¨¢n
- Seguridad ciudadana
- Delitos orden p¨²blico
- Am¨¦rica
- Casos judiciales
- Ideolog¨ªas
- Asia
- Relaciones exteriores
- Delitos
- Armamento
- Sucesos
- Defensa
- Pol¨ªtica
- Justicia
- Oriente pr¨®ximo