Una obra 'multi'
Con el patrocinio de la Fundaci¨®n March, compuso Antonio Garc¨ªa Demestres (Barcelona, 1960) la ¨®pera de c¨¢mara Para ti - Soledades sin sombra, presentada el mi¨¦rcoles en el C¨ªrculo de Bellas Artes por el Centro para la Difusi¨®n de la M¨²sica Contempor¨¢nea en versi¨®n, excelente, de la compa?¨ªa Suena de Alabastro, que dirige Ernesto Mart¨ªnez Izquierdo (Barcelona, 1962).La obra es un multi -prosa, poes¨ªa, coreograf¨ªa, v¨ªdeo, escultura, pintura, grafismo, iluminaci¨®n, m¨²sica grabada y directa-, g¨¦nero poco cultivado entre nosotros y cargado de posibilidades para la expresi¨®n actual. Entre par¨¦ntesis: echo de menos que algunos compositores que madrugaron en el g¨¦nero (De Pablo y Marco en Madrid, Mestres en Barcelona) casi lo han abandonado precisamente cuando existen en Espa?a algunas posibilidades t¨¦cnicas mayores que entonces.
Para ti - Soledades sin sombra
Texto: Ignacio Prat. M¨²sica: Antonio Garc¨ªa Demestres. Int¨¦rpretes: Joan Cabero, Pilar Buira, Garc¨ªa Demestres, Jaume del Alamo, Jos¨¦ y Ram¨®n Moscard¨® y Carlos Delgado. Grupo instrumental: director, Mart¨ªnez Izquierdo. Coreograf¨ªa: Pilar Buira. V¨ªdeo: Juli¨¢n ?lvarez. Fotograf¨ªa: Daniele Mussatti. Escultura: Almudena Armenta y Joaqu¨ªn Gonz¨¢lez. Trajes: ?gata Ruiz de la Prada. Mobiliario: Atico, Madrid. Comic: Pere Bardaj¨ª. Iluminaci¨®n: Carlos Campanario. Sonido: J. Nuix. C¨ªrculo de Bellas Artes de Madrid, 18 de febrero.
En Para ti - Soledades sin sombra se refleja constantemente la imagen incitadora de Ignacio Prat (Zaragoza, 1945), "un chico pelirrojo que en la Universidad de los sesenta conoc¨ªa toda la literatura del mundo", como escribe Manuel Esteban; un poeta delirante, amigo de soledades e imaginador inclasificable.
Pero hasta esa sombra permanente queda subsumida en la personalidad varia, rica y polirac¨¦tica del autor, Garc¨ªa Demestres. Formado musicalmente en Barcelona al lado de Soler, Gratac¨®s, Rampal, Finck y Rib¨®, pasa luego por las orientaciones de Chailly, las escuelas superiores de Wuperttal y Par¨ªs, las experiencias de Darmstadt, del Centro Acantos o del IRCAM. Entre unos y otros dan profundidad a un horizonte que instintivamente Garc¨ªa Demestres ten¨ªa abierto ante s¨ª de par en par. Pero a la hora de las influencias (perd¨®nese este tic de los cr¨ªticos) recibo la impresi¨®n de que Alemania ha pesado bastante m¨¢s que Francia.
Por si fuera poco, Demestres es cantante, lo que, junto a otras pr¨¢cticas musicales, aleja su quehacer de tanto te¨®rico como abunda desconectado del barro artesanal. Quiz¨¢ el defecto de Para ti es, justamente, el exceso; parece que el autor hubiera sentido la necesidad, tan juvenil por otra parte, de derrochar invenciones, ideas y soluciones a lo largo de una pieza de dos horas. Esto mismo avala el acierto general, ya que la obra se sigue con inter¨¦s y en su curso la po¨¦tica de Prat est¨¢ acompa?ada por la de Carvajal, Duque, Amusco, Gimferrer, Hern¨¢ndez, Jover, Siles y el ling¨¹ista Gargallo. A la fotografla de Mussatti, a la graciosa moda de ?gata Ruiz de la Prada o a la escultura de Almudena Armenta han de a?adirse tres buenos v¨ªdeos de Juli¨¢n ?lvarez, de los cuales Cloaca m¨¢xima se eleva, a mi juicio, sobre Batlantic e Im¨¢genes de bombardeo.
La ¨®pera desarrolla, como n¨²cleo central, la historia de un caso cl¨ªnico: el de Prattheln, afectado de delirio de filiaci¨®n y paranoia, lo que nos introduce en un mundo superreal, pleno de reacciones y sensaciones fugitivas que la m¨²sica y el canto no tratan de apresar, acompa?ar ni nada parecido. Se suman, simplemente, sin grandes complicaciones, y hasta cediendo a un epis¨®dico belcantismo, al gran juego m¨²ltiple de la ¨®pera en una de las posibles e infinitas ramificaciones aludidas por Josep Soler en su adivinatorio comentario.
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