Terror, s¨ª; ?pero por qu¨¦ calificarlo 'musulm¨¢n' o '¨¢rabe'?
Me inquieta la tendencia a usar la simplista ecuaci¨®n musulm¨¢n-terrorista-¨¢rabe. Hay casi 200 millones de ¨¢rabes y cerca de 1.000 millones de musulmanes en el mundo. ?Es justo o razonable que se les se?ale con la etiqueta terrorista por el uso indiscriminado de un identificativo adjetivo, musulm¨¢n o ¨¢rabe, en la informaci¨®n de los diversos medios de comunicaci¨®n sobre los actos terroristas emanados de Oriente Pr¨®ximo?Los periodistas, que presumen de objetividad en las noticias, son curiosamente selectivos en sus descripciones. Nunca hacen referencia a la banda Baader-Meinhof como "terroristas cristianos". A la japonesa Facci¨®n del Ej¨¦rcito Rojo nunca se la llama "terrorista shinto". El exterminio de campos y ciudades en L¨ªbano no es calificado como "terrorismo jud¨ªo".
Las noticias de L¨ªbano invariablemente hacen referencia al "Beirut oeste musulm¨¢n", como si la religi¨®n fuera responsable de la anarqu¨ªa que all¨ª reina. Hasta 1975 Beirut era una pr¨®spera ciudad cosmopolita, notoria por la armoniosa coexistencia de los barrios musulmanes y cristianos. Y Beirut oeste siempre fue una mezcla de musulmanes y cristianos viviendo codo con codo; a¨²n lo es. Los musulmanes que viven all¨ª no han sufrido menos que los cristianos la espiral de violencia y de terror.
El actual primer ministro israel¨ª, y por lo menos uno de sus predecesores, fueron consumados practicantes del terrorismo hace cuatro d¨¦cadas.
Hoy, muchos de los que con raz¨®n son llamados terroristas en Oriente Pr¨®ximo son cristianos; otros son jud¨ªos. Ciertamente, hay musulmanes que son terroristas, ?pero tienen que ser unidas inexorablemente las palabras ¨¢rabe y musulm¨¢n a la palabra terrorista?
. Esto ofende a la justicia y al juego limpio, y es contrario a las normas ¨¦ticas de la pr¨¢ctica period¨ªstica. A la Prensa no se le ocurrir¨ªa escribir ladr¨®n negro o asesino cristiano. ?Por qu¨¦, entonces, un adjetivo calificativo racial o religioso se convierte en aceptable cuando se trata de ¨¢rabe o musulm¨¢n? Esta da?ina pr¨¢ctica de discriminaci¨®n despide un fuerte olor a racismo y a prejuicios religiosos que est¨¢ causando mucho rencor y resentimiento entre los ¨¢rabes y musulmanes.
Y lo que es a¨²n m¨¢s importante, engendra entre los americanos un antagonismo sin fundamento, pero amenazante, hacia todos los ¨¢rabes y musulmanes, incluso hacia aquellos que han vivido en Am¨¦rica durante generaciones como ciudadanos de Estados Unidos.
Es dif¨ªcil creer que esta pr¨¢ctica existe por un irresponsable descuido editorial. Uno se ve obligado a preguntar:'?podr¨ªa ser un plan premeditado para promover el odio hacia los musulmanes y ¨¢rabes y alimentar el fuego del fanatismo y el conflicto religioso? El terrorismo y su inquietante conexi¨®n con el islam fue una de las preocupaciones expresadas por los muchos jefes de Estado que asistieron a la V Cumbre Isl¨¢mica, que se celebr¨® recientemente en Kuwait. Al dirigirse a la asamblea, el rey Hussein de Jordania reflej¨® su preocupaci¨®n cuando dijo:
"Se est¨¢n haciendo muchos esfuerzos por debilitar a los musulmanes mediante el sistema de alimentar sus conflictos internos y la internacionalizaci¨®n de sus problemas. Hoy somos testigos de una campa?a cuidadosamente orquestada para empa?ar nuestra imagen isl¨¢mica mediante la uni¨®n el islam a acciones terroristas que son realizadas por ciertos individuos y grupos. El islam, nuestra religi¨®n, rechaza esos actos. El islam, para el que la preservaci¨®n de la vida es un principio b¨¢sico, proh¨ªbe cualquier ejecuci¨®n ilegal".
"No vemos que los actos terroristas sean atribuidos a la religi¨®n de quienes los realizan, excepto en el caso de que se trate de ¨¢rabes y musulmanes. ?Por qu¨¦? Porque los enemigos de ¨¢rabes y musulmanes encuentran en las acciones terroristas un medio sencillo para distorsionar nuestra imagen ante la opini¨®n mundial y aislarnos, para justificar sus actos de agresi¨®n, perpetuar su hegemon¨ªa y llevar a cabo su pol¨ªtica expansionista".
Genes criminales
A los medios de comunicaci¨®n americanos, aparentemente, les result¨® conveniente ignorar una resoluci¨®n de la cumbre isl¨¢mica que un¨¢nimemente condenaba el terrorismo de cualquier clase como contrario a las ense?anzas del islam. Esa omisi¨®n no es sino otra forma de la discriminaci¨®n que he descrito.
El origen ¨¦tnico y la afiliaci¨®n religiosa no implica que se porten genes de impulso criminal. Tratar de crear tal impresi¨®n puede, por consiguiente, frustrar la buscas por parte de la humanidad de la paz y la fraternidad que todas las religiones preconizan, incluido el islam.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
?Tienes una suscripci¨®n de empresa? Accede aqu¨ª para contratar m¨¢s cuentas.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.