La Administraci¨®n concede tres licencias para la extracci¨®n de coral

El Ministerio de Agricultura ha resuelto conceder, para el bienio 1987-1988, tres de las siete solicitudes de empresas coraleras, que han tenido que ajustarse a los nuevos mecanismos que exige la Administraci¨®n desde que el pasado a?o se decidi¨® excluir la barra italiana como artilugio de pesca. Adem¨¢s, se han concedido siete licencias para buceadores individuales, de las nueve presentadas al concurso p¨²blico.Las solicitudes aprobadas corresponden a dos empresas de Adra (Almer¨ªa), para la explotaci¨®n del mar de Albor¨¢n, y una tercera en Baleares. La Direcci¨®n General de Pesca no ha hecho a¨²n p¨²blicos los nombres de las empresas porque est¨¢ pendiente de un informe del Cuartel General de la Armada. La dificultad mayor se encuentra en a participaci¨®n de un barco de nacionalidad francesa que tendr¨ªa conexiones con uno de los solicitantes.

El nuevo mecanismo que sustituye a la barra italiana recoge la filosof¨ªa de conjugar selectividad en el fondo del mar con la conservac¨ª¨®n de la vida del mar. El esquema de los nuevos aparatos se concreta generalmente en un submarino tripulado unido por una serie de cables a un barco que hace de nodriza.

Rafael Ja¨¦n Vergara, director general de Pesca, afirm¨® a este peri¨®dico que en un futuro inmediato el Minister¨ªo de Agricultura, Pesca y Alimentaci¨®n har¨¢ p¨²blico un nuevo concurso de pesca de coral para dar mayor participaci¨®n a las empresas que quieran acogerse a la nueva l¨ªnea del ministerio.

Jos¨¦ Mar¨ªa Fern¨¢ndez, de la Sociedad de Pesca de Almer¨ªa, que era hasta ahora, junto a dos empresas propiedad de los hermanos Linares, de Adra, y, de Francisco Galt¨¢n, los ¨²nicos cuatro explotadores de los yacimientos de coral, no acudi¨® a la subasta p¨²blica ofrecida por la Administraci¨®n. "Ha faltado claridad en la resoluci¨®n y no nos hemos presentado porque no han sabido explicar lo que quer¨ªan en concreto", destac¨® Fern¨¢ndez, para quienla eliminaci¨®n de la barra italiana significa la supresi¨®n de la actividad coralera.