Risitas

Bajo los t¨ªtulos de Risas desde el "Banco Azul" y La l¨®gica arrogancia socialista, en la edici¨®n del 7 de marzo, se muestra un descontento a la actitud de los socialistas durante el debate sobre el estado de la naci¨®n. En el primer caso, simplemente deseo indicar que nos falta un poco de costumbre de ver algo tan normal como una discusi¨®n parlamentaria. En el Reino Unido, donde esa experiencia es de siglos, no suele haber risitas, suele haber carcajadas. No recuerdo haber le¨ªdo en la Prensa brit¨¢nica nada en contra de esa humana actitud. Por otra parte, si mi memoria no me falla, tambi¨¦n v¨ª risitas en la oposici¨®n. ?Es que ¨¦stas son aceptables y aqu¨¦llas no? Con relaci¨®n al art¨ªculo de Antonio Guerra, creo ver en ¨¦l algo de despecho o amargura. Concentro mis comentarios en los siete ejemplos que ofrece para demostrar la falta de humildad del gonzalismo, y sobre todo para achacar sus ¨¦xitos a la Virgen de F¨¢tima.

En primer lugar, indicar que de los siete ejemplos, los seis primeros habr¨ªa que achacarlos a su buen hacer, porque de lo contrario tendr¨ªamos el exponente de los m¨¢s grandes milagros habidos en la humanidad: el Esp¨ªritu Santo habr¨ªa bajado a iluminar a los hist¨®ricos, a Willy Willy Brandt, a socialistas retr¨®grados, al Gobierno de UCD, a 10 millones de espa?oles (?cantidad de palomas!), a otros ocho millones y, por ¨²ltimo, a la oposici¨®n.

El punto seis me hizo mucha gracia (aunque no me he re¨ªdo por no molestar). De modo que "?el poder siempre facilita la unidad que supone el mantenimiento del carga de cada uno?". ?D¨®nde estaba usted, se?or Guerra, Antonio, durante la desintegraci¨®n del Gobierno de UCD?

Por ¨²ltimo, hablar de que la izquierda sea afortunada cuando llega al poder —baja del petr¨®leo— es verdaderamente chocante. Cuando llega al poder en 1931 se encuentra con una crisis a nivel mundial. En 1982 la crisis de 1973, aunque aminorada, persist¨ªa y persiste. No me lo compare con el per¨ªodo inmediato pasado, h¨¢galo con una perspectiva un poco m¨¢s amplia y podr¨¢ comprobar que si alguien ha tenido verdadera suerte ha sido la derecha. Como dir¨ªa mi maestro: a la derecha, lo que es de la derecha (la potra), y a la izquierda, lo que es de la izquierda (el buen hacer). Acepto sus risitas. .