"El sistema no puede absorber todas las demandas de la poblaci¨®n"
Declaraciones de Mich¨¨le Barzach, ministra francesa de Ia Salud
Mich¨¨le Barzach, ministra de la Salud y la Familia en el Gobierno franc¨¦s, considera que las demandas de la poblaci¨®n en materia de sanidad, van m¨¢s r¨¢pidas de lo que el sistema puede absorber. Para evitar conflictos hay que responsabilizar a la poblaci¨®n para que comprenda que esas nuevas demandas se refieren al bienestar m¨¢s que a la salud y no todas pueden ser satisfechas, Establecer el l¨ªmite es uno de los principales problemas, junto con el descenso demogr¨¢fico que tienen los pa¨ªses occidentales, seg¨²n la impulsora de la llamada ley del tercer hijo, que financia con una cantidad mensual el nacimiento de un tercer reto?o en las familias francesas."Tenemos que hacer a la poblaci¨®n consciente", dice Mich¨¦le Barzach, que ha visitado Espa?a para participar en un seminario sobre Perspectivas de desarrollo entre Francia y Espa?a en la industria farmac¨¦utica y la investigaci¨®n, "de que el descenso demogr¨¢fico es el problema de los 25 a?os que vienen. En ese plazo de tiempo ser¨¢ mayor el n¨²mero de viejos que el de la poblaci¨®n activa, y toda la estructura econ¨¢ntica se modificar¨¢ con el cambio de la pir¨¢mide de poblaci¨®n".
Al brusco descenso del n¨²mero de personas que financien un sistema de protecci¨®n social hay que a?adir, seg¨²n Barzach, otro problema com¨²n a los pa¨ªses occidentales. "Las demandas de la poblaci¨®n van m¨¢s r¨¢pidas de lo que el sistema puede absorber. El problema es que los hombres y las mujeres tienen que tomar conciencia de que hay un l¨ªmite a lo que ellos piden. Se quiere una nueva vida, en la que las demandas son, m¨¢s que de salud, de bienestar. El conflicto de los pa¨ªses que han escogido un sistema de protecci¨®n social es que deben poner un l¨ªmite, diferenciando entre salud y bienestar".
Natalidad
La aprobaci¨®n, en octubre de 1986, de una ley que fomenta la natalidad ha sido la medida m¨¢s espectacular de las tomadas por Mich¨¨le Barzach en el tiempo que lleva al frente del Ministerio de la Salud y la Familia. Francia ha sido el primer pa¨ªs europeo que ha tomado la decisi¨®n de parar el paulatino descenso de la poblaci¨®n, ofreciendo una cantidad mensual de 48.000 pesetas, algo m¨¢s que la mitad del salario m¨ªnimo durante el tiempo de crianza a las mujeres que tengan un tercer hijo. La propia Mich¨¨le, madre de dos ni?as, de siete y seis a?os, con la cl¨¢sica elecancia francesa reflejada en el p¨¢ ?uelo de seda color melocot¨®n, que adorna un estricto traje negro, afirma: "Si no fuese ministra, me gustar¨ªa aumentar con un miembro su familia, pero la edad, 43 a?os, y las continuas ocupaciones lo irnpiden".
"La mayor¨ªa de las parejas tienen dos ni?os", dice Mich¨¨le Barzach, "y el problema del crecimiento demogr¨¢fico es el del tercer ni?o, porque s¨®lo con dos hijos no se alcanza el nivel de reemplazo de la poblaci¨®n".
"Las mujeres quieren ir a trabajar, y eso ha creado un nuevo equilibrio, que no queremos detener o paralizar. Antes de aprobar la ley mantuvimos reuniones con la asociaci¨®n de la patronal", contin¨²a Mich¨¨le, "porque las mujeres no quieren volver a casa a criar un ni?o para no perder su trabajo".
Otra de las acciones desarrolladas en fiavor de la familia -"la familia es una riqueza", dice Mich¨¨le Barzach- consiste en facilitar que los ancianos convivan con sus hijos. "Tenemos un problema muy grande con los ancianos. La familia empieza a romperse y los env¨ªan a hospitales y centros de asilo. Hemos proporcionacio la ayuda de asistentes sociales para que puedan quedarse en casa con ellos. El nivel humano es mayor y se reduce el coste econ¨®mico de la atenci¨®n hospitalaria para la tercera edad, que ha aumentado en los ¨²ltimos a?os.
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