El Barcelona, campe¨®n de la Copa Korac

El Barcelona gari¨® ayer, por primera vez, la Copa Korac y por tercer a?o consecutivo un t¨ªtulo europeo. Y lo hizo casi sin despeinarse. Anoche, en el partido de vuelta de la final, venci¨® en Limoges por 97-86. Once puntos de ventaja que, sumados a los 21 del Palau Blaugrana, convirtieron la diferencia definitiva en 32.La Prensa de Limoges dec¨ªa ayer que su equipo pod¨ªa llegar a tocar la Luna y Ostrowski afirmaba que todos iban a jugar el partido de su vida. Pero los franceses, cumpliendo con su curr¨ªculo de baloncesto irregular, ni siquiera llegaron a abandonar la rampa de lanzamiento en su viaje lunar y todos, excepto Ostrowski, jugaron un p¨¦simo encuentro.

El Barcelona, sin embargo, tard¨® alg¨²n tiempo en afianzarse. La salida alocada del Limoges (6-0 y 15-6) ten¨ªa una explicaci¨®n m¨¢s all¨¢ de la histeria acumulada por los franceses desde su derrota en Barcelona. Un grano de arena se hab¨ªa filtrado en la fina maquinaria azulgrana. Bryant estaba nervioso y desconcentrado porque Kea, que se alej¨® unos metros del aro, acertaba m¨¢s de lo debido. A¨ªto, en su funci¨®n de mec¨¢nico, acert¨® al buscar un r¨¢pido recambio. Trumbo ocup¨® el puesto de Bryant y la m¨¢quina se puso a funcionar a toda marcha. Con Trumbo, el Barcelona empat¨® a 17 puntos, se seren¨® y rebaj¨® los humos de un Limoges en el que fallaba estrepitosamente su aspecto lanzador, con dos nerviosos y desacertados Dacoury y Thompson.

El despegue del Bar?a se inici¨® con la ¨²nica presencia en la pista de Soloz¨¢bal. Casi renqueante, Soloz¨¢bal, el tercer hombre del tri¨¢ngulo m¨¢gico que completan Epi y Sibillo, entr¨® con 27-23 para el Limoges y se march¨® en el descanse con un 42-35 para el Barcelona. Es decir, un parcial de 19-7. Fueron los mejores minutos de un brillante Epi (con 6 triples), mientras Trumbo dejaba en el olvido a los que le consideraban corno una genuina madre bajo los aros. En la segunda mitad, el Limoges y las bandas musicales de las gradas dejaron de creer en los milagros. El objetivo franc¨¦s pasaba a ser evitar una derrota parcial. Pero el Bar?a no s¨®lo no fren¨® su ritmo, sino que apret¨® a¨²n m¨¢s el acelerador. Logr¨® su m¨¢xima ventaja en el minuto 31 (77-58) y Aito pudo permitirse varias frivolidades: homenajear a De la Cruz, que jug¨® ayer el que puede ser su ¨²ltimo partido con el Bar?a, alegrar la noche del olvidado Ortiz: y hacer debutar en Europa al j¨²nior Jordi Soler.