M¨¢s que una asociaci¨®n
Al leer el editorial e informaciones del lunes 30 de marzo en EL PA?S sobre las beatificaciones del pasado d¨ªa 29, se tiene la impresi¨®n de que la Iglesia cat¨®lica es para los comentaristas algo as¨ª como una asociaci¨®n piadosa o una sociedad de amigos con parecidas aficiones. No es eso la Iglesia cat¨®lica.Quien, con menos incompetencia, se interese en escribir o referirse a la Iglesia cat¨®lica, no puede dispensarse de leer una y otra vez los primeros cap¨ªtulos de la constituci¨®n Luz de las gentes, del Concilio Vaticano II, tan citado en su peri¨®dico. Tampoco se puede prescindir, si se quiere hablar con seriedad sobre la Iglesia, de confrontar, algunas de las m¨²ltiples citas que ah¨ª se indican. De otro modo, seguiremos avanzando por l¨ªneas divergentes y no podremos entendernos a la hora de hablar sobre nuestra historia. La historia de Espa?a de hoy y de ayer que, despu¨¦s de pasados m¨¢s de 50 a?os desde la famosa frase, parece ser todav¨ªa algo cat¨®lica.-
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