Efectos especiales

Los tres espadas utilizaron, como en las pel¨ªculas, los trucos y efectos especiales y pueblerinos que producen a un amplio sector del p¨²blico el tic de llevarse la mano al bolsillo para sacar el pa?uelo solicitando y obteniendo en exceso, como en este caso, trofeos para los diestros. Aunque ¨¦stos actuaron siempre con valor, dada la seriedad y trap¨ªo de los toros lidiados. A veces torearon tambi¨¦n seg¨²n los c¨¢nones cl¨¢sicos, que caldean menos en los tendidos, convirtiendo as¨ª la corrida en una extra?a mezcolanza.Ruiz Miguel, con su eterna hambre de triunfo, barrunt¨® los citados efectos (rodillazos, espaldinas, etc¨¦tera) siempre ante la cara fosca de sus enemigos, y toreo der g¨¹eno, sobre todo en una serie de naturales que instrument¨® al cornivuelto y cuajado segundo, a comp¨¢s abierto, con mucho temple, lentitud y ligaz¨®n, y plenos de enjudia y sabor. Con el vocinero retinto que sali¨® en cuarto lugar repiti¨®. A ambos los fulmin¨® con la tizona.

Jos¨¦ Antonio Campuzano tambi¨¦n mezcl¨® la ortodoxia con los trucos. La ortodoxia con el colorao tercero, que tardeaba, y con el que no conect¨® con la concurrencia hasta que se dedic¨® a los desplantes y el toreo de galer¨ªa. En el otro, un bello ejemplar de espl¨¦ndida l¨¢mina, negro chorreado, tard¨® en centrarse, pero a base de rabia y entrega transform¨® las iniciales trapacinas en una buena y reposada labor.

Paco Machado utiliz¨® menos los efectos especiales porque no los debe conocer todav¨ªa. Y porque se le ve que quiere torear con gusto.