El d¨®lar se sit¨²a en cotas hist¨®ricas m¨ªnimas frente al yen y al nivel m¨¢s bajo del ano respecto a la peseta

El d¨®lar se situ¨® ayer en las cotas m¨ªnimas de la historia frente al yen, al cerrar en el mercado de Tokio a 141,35, frente a los 142,30 de la jornada anterior. Antes de alcanzarse este fixing, la divisa norteamericana estuvo cambi¨¢ndose a 141,15 yenes, en una ca¨ªda que los analistas achacan a las ventas especulativas producidas por rumores -confirmados luego- respecto a que el d¨¦ficit comercial de Estados Unidos para el mes de febrero era peor de lo esperado.El Banco de Jap¨®n intervino en el mercado para impedir una mayor depreciaci¨®n del d¨®lar, cuando ¨¦ste descendi¨® hasta 141,20, momentos antes del final de la sesi¨®n, pero su efecto fue anulado r¨¢pidamente por una nueva oleada de ventas. El ministro japon¨¦s de Finanzas, Niichi Miyazawa, anunci¨® ayer que la actual paridad, en torno a 141 yenes por d¨®lar, est¨¢ perjudicando gravemente a la economia nipona. Miyazawa afirm¨® que nada ha cambiado desde la reuni¨®n del grupo de los cinco de septiembre de 1985, puesto que el desequilibrio comercial entre EE UU y Jap¨®n no se ha corregido porque ¨¦ste ¨²ltimo pa¨ªs no ha expandido suficientemente su demanda interior, mientras que los d¨¦ficit comercial y presupuestario norteamericanos no han sido reducidos, seg¨²n Shearson Leliman/ American Express.

En los mercados europeos, el d¨®lar roz¨® a la baja significativas barreras psicol¨®gicas, como 1,80 marcos alemanes (cerr¨® en Francfort a 1,8036) o 6,00 francos franceses (cerrr¨® en Par¨ªs a 6,0020). En Madrid, el d¨®lar alcanz¨® un nuevo r¨¦cord a la baja en lo que va de a?o, al fijarse un cambio de 126,870, que supone una revaluaci¨®n de un 3,01 % para la peseta desde principios de 1987. El m¨ªnimo anual anterior se hab¨ªa establecido el 2 de enero, a 126,9 pesetas por d¨®lar.

Mientras, la cotizaci¨®n de los metales preciosos registr¨® ayer nuevas e importantes alzas. El oro subi¨® por encima de los 440 d¨®lares/onza, mientras que la plata superaba los siete d¨®lares/onza. El aumento de la cotizaci¨®n de los metales preciosos refleja el temor de los inversores ante las implicaciones inflacionistas que conlleva el descenso del d¨®lar.