La punta del iceberg

"Mi impresi¨®n es que s¨®lo hemos publicado un 10% de lo que ha pasado en el tema de las corrupciones policiales", dice Jos¨¦ D¨ªaz Herrera, fundador y director del equipo de investigaci¨®n de Cambio 16. "Con esto no estoy acusando a la mayor parte de los funcionarios -los corruptos son los menos-, pero no se ha profundizado lo suficiente en toda la corrupci¨®n de esa minor¨ªa".Rafael Cid y Miguel ?ngel Liso no se muestran, sin embargo, muy de acuerdo con la literalidad de esta cifra. Les parece exagerada, aunque s¨ª piensan que el Gobierno s¨®lo ha investigado lo poco que se ha publicado en la Prensa.

Jos¨¦ D¨ªaz, Rafael Cid y Miguel ?ngel Liso comenzaron la investigaci¨®n sobre el Dossier negro de la polic¨ªa por una simple rutina period¨ªstica. "Recibimos algunos indicios", afirman, "de que pod¨ªa haber polic¨ªas implicados en lo que m¨¢s tarde result¨® ser el caso Venero. Cuando las fuentes oficiales nos cerraron las puertas a cal y canto, pensamos que ¨ªbamos por el buen camino. Logramos enterarnos de que se estaba llevando a cabo una investigaci¨®n secreta. Lo primero que hicimos fue viajar a Santander, que era de donde ven¨ªan los primeros datos. Despu¨¦s, los via jes a Santander se hicieron habituales".

Los tres periodistas se hab¨ªan repartido el trabajo y ya ten¨ªan los datos lo suficientemente contrastados cuando se les present¨® una dificultad -"quiz¨¢ la m¨¢s fuerte", en opini¨®n de Rafael Cid, que es compartida por sus dos compa?eros-: "El Ministerio del Interior trat¨® de paralizar nuestra investigaci¨®n y su publicaci¨®n porque podr¨ªa perjudicar, seg¨²n los responsables del ministerio, una posterior investigaci¨®n oficial y a fondo de la corrupci¨®n policial. Luego nos dimos cuenta de que esto no sirvi¨® para nada, y los funcionarios de la propia Administraci¨®n aprovecharon la l¨ªnea de investigaci¨®n que nosotros hab¨ªamos abierto".

Los premiados con la cuarta edici¨®n del Ortega y Gasset dicen que, como consecuencia de la publicaci¨®n de sus datos, se tomaron las medidas inmediatas por parte del Ministerio del Interior y que han acabado en los juzgados. Sin embargo, admiten que "no han ca¨ªdo todas las cabezas que deb¨ªan, como hubiera sucedido en un pa¨ªs con m¨¢s a?os de vida democr¨¢tica que Espa?a", en palabras de Jos¨¦ D¨ªaz Herrera.

Intuici¨®n y trabajo

Sobre las condiciones que se requieren para ser un periodista de investigaci¨®n en Espa?a, Miguel ?ngel Liso explica que b¨¢sicamente se requiere trabajo y cierta dosis de intuici¨®n, "y, eso s¨ª, dedicaci¨®n para estar constantemente sobre el tema, incluso en los fines de semana, viajando a veces por tu cuenta, utilizando un dinero que luego no recuperas".?Y la valent¨ªa? ?Se le supone al periodista que se dedica a la investigaci¨®n sobre estos temas para enfrentarse a las amenazas e intentos de soborno? Liso asegura que ¨¦l ha pasado mucho miedo; D¨ªaz Herrera afirma que ahora ya no pasa miedo, y Cid contesta que se ha acostumbrado a pasar miedo, "porque en estos casos estoy con Frascuelo cuando afirm¨®: ?qui¨¦n dice miedo si existen hospitales?"

Para los tres periodistas premiados, existe una base material imprescindible para una buena investigaci¨®n: que la empresa te ofrezca medios materiales aun a sabiendas de que confirmar un dato puede costarte un mes. "Pero tampoco podemos quedarnos en un periodismo de dobles versiones. Se requiere ahondar mucho m¨¢s, hasta descubrir lo oculto. Aunque el poder -sea de UCD o socialista- ya se ocupa de que permanezca oculto lo que no le interesa y de poner dificultades para que no salga a la luz", a?ade D¨ªaz.