Sonrojo

Observo con estupor que en algunos medios de comunicaci¨®n se insin¨²a la existencia de unas extra?as anomal¨ªas cong¨¦nitas en la tr¨¢quea del trabajador muerto en Reinosa. Miro nuestra ¨²nica televisi¨®n y veo que, curiosamente, cuando el Gobierno tiene planteados dos conflictos inacabables y a los que no parece encontrar soluci¨®n alguna (con independencia del grado de raz¨®n de cada parte), dedican la mitad del Informe semanal, a una hora de, m¨¢xima audiencia, a poner de manifiesto lo malos que son los trabajadores de Iberia y lo mucho que se equivocan los m¨¦dicos. Me quedo dormido con sensaci¨®n de asco... se me aparecen im¨¢genes de cuando era estudiante... los a?os sesenta... el eterno conflicto universitario contra el fascismo con la represi¨®n como ¨²nica respuesta... un compa?ero, Enrique Ruano, "se cae" por una ventana y muere tras ser detenido... un diario madrile?o no tiene el m¨¢s m¨ªnimo reparo en publicar sus anotaciones ¨ªntimas insinuando problemas psiqui¨¢tricos que le llevan al suicidio.Me despierto sobresaltado. ?No se ha terminado la dictadura y con ella la manipulaci¨®n informativa? ?Es que acaso ciertos medios de comunicaci¨®n tienden a agradar al poder sin que ¨¦ste se lo pida? ?O es que se lo pide? ?Estamos volviendo a algo parecido al punto de partida con un lavado de cara, cerrando as¨ª un c¨ªrculo macabro en el que siempre se retorna al poder absoluto e indiscutible?

Pero no, por lo menos me queda la posibilidad de que usted publique esta carta, que alguien la lea y quiz¨¢ conecte con mis pensamientos y mis temores, y ?qui¨¦n sabe?... a lo mejor alg¨²n cargo p¨²blico o su portavoz esbozan un leve sonrojo ?O simplemente la tirar¨¢n a la papelera por inconveniente?- .