URSS, Tracer y un equipo de la NBA disputar¨¢n el primer torneo 'open' en Estados Unidos

Un torneo triangular que en Estados Unidos se ha presentado como ensayo general del futuro baloncesto open -sin distinci¨®n entre profesionales y presuntos aficionados- se celebrar¨¢ en Milwaukee del 23 al 25 de octubre con participaci¨®n del equipo nacional de la Uni¨®n Sovi¨¦tica, del Tracer de Mil¨¢n y de un equipo representativo de la Asociaci¨®n Nacional de Baloncesto (NBA), que podr¨ªa ser bien una selecci¨®n, bien uno de sus clubes. Es el primer torneo abierto en territorio norteamericano, aunque en Europa ya ha habido choques con equipos de la NBA.Significativamente, el torneo lo organiza la Asociaci¨®n de Baloncesto Aficionado de Estados Unidos (ABAUSA), la federaci¨®n que hasta ahora se ha opuesto, en reuniones de la Federaci¨®n Internacional (FIBA), a la aceptaci¨®n del baloncesto abierto. La ABAUSA se lucra notablemente con la concesi¨®n de licencias a los jugadores profesionales reclasificados que marchan a Europa: cuantos m¨¢s a?os hayan actuado en la NBA, m¨¢s cara es su licencia de supuestos aficionados.

Ahora, el director ejecutivo de la ABAUSA, William Wall, explica que el torneo "se ha montado como prueba, para ver c¨®mo compiten uno contra otro los profesionales y los mejores equipos aficionados". Ante la FIBA, la ABAUSA nunca ha argumentado que su oposici¨®n a dejar jugar a los profesionales con los dem¨¢s jugadores se debe al temor a perder ping¨²es ingresos, sino que "es malo para el deporte porque no habr¨ªa partido, tan buenos son los hombres de la NBA". Suelen citar lo absurdo que ser¨ªa un partido entre los Lakers y Egipto..., aunque nunca dicen que es igualmente absurdo un encuentro entre los ol¨ªmpicos de Bobby Knight, en 1984 con Michael Jordan y Pat Ewing-, y Uruguay, por ejemplo.

Algunos observadores ven en el patrocinio del nuevo torneo por la ABAUSA una jugada maquiav¨¦lica para demostrar que tienen raz¨®n en sus argumentos, pero otros responden que Wall ha visto la inevitabilidad de la apertura a los profesionales de aqu¨ª a los juegos de Barcelona en 1992. ?l mismo reconoce: "Si perdemos en 1988, el p¨²blico americano puede exigir que enviemos a los mejores profesionales".

Es significativo que el Tracer haya sido anunciado como "campe¨®n de Italia" y no de la Copa de Europa: la Liga italiana tiene m¨¢s prestigio en Estados Unidos. El conjunto milan¨¦s -que se acaba de despedir de su entrenador americano, Dan Peterson- es el mayor partidario de una Liga europea profesional idea a la que clubes como el Real Madrid a¨²n parecen resistirse.