Julio Feo y Eduardo Serra anuncian en plena campa?a electoral que dejan sus cargos en la Admistraci¨®n
EL PA?S Julio Feo y Eduardo Serra, secretario general de la Presidencia y secretario de Estado de Defensa, respectivamente, han anunciado en plena campa?a electoral que abandonar¨¢n en breve sus cargos. Feo, que dejar¨¢ su puesto el mes pr¨®ximo, ha comunicado al presidente Felipe Gonz¨¢lez su intenci¨®n de pasar a la empresa privada, y Serra dirigir¨¢ a partir del pr¨®ximo julio la Fundaci¨®n Antidroga (FAD), presidida por el general Manuel Guti¨¦rrez Mellado. Tanto en Presidencia como en Defensa, han negado que exista intencionalidad pol¨ªtica en ambas decisiones, extremo que los dos protagonistas han corroborado.
Feo, cuya dimisi¨®n fue confirmada ayer, comunic¨® al final de la pasada legislatura a Felipe Gonz¨¢lez que deseaba abandonar el cargo. Como en anteriores casos, Gonz¨¢lez le convenci¨® para que se quedara m¨¢s tiempo. Seg¨²n amigos int¨ªmos de Feo, en su car¨¢cter enormemente vitalista y en su necesidad de dedicar m¨¢s tiempo a su vida privada -"que comparte con una nueva mujer desde hace unos cuatro a?os", afirman-, as¨ª como, en menor medida, en "su necesidad de disfrutar de una mayor remuneraci¨®n econ¨®mica por su trabajo" se esconden las claves de su decisi¨®n.,Feo, a sus 50 a?os, piensa dedicarse a organizar una empresa de imagen, al igual que uno de sus m¨¢s ¨ªntimos, Roberto Laguardia, que dirige la empresa Imagen 2000. Las apetencias profesionales de Feo se han dirigido siempre hacia la empresa privada y no hacia alg¨²n otro cargo en la Administraci¨®n, seg¨²n aseguran colaboradores suyos. "Hay pocas peticiones de las que se solicitan al presidente que tengan m¨¢s posibilidades de triunfar que cualquier deseo de Juio", dicen esas fuentes. Seg¨²n otras fuentes consultadas, Feo aspir¨® hace meses a ser nombrado secretario de Estado para el Deporte, cargo para el que en cambio fue designado Javier G¨®mez Navarro.
Julio Feo regresa a la empresa privada, tras cinco a?os como ayudante de Felipe Gonz¨¢lez y una d¨¦cada de estrecha colaboraci¨®n intermitente con el l¨ªder socialista.
Julio Feo revel¨® por primera vez p¨²blicamente sus prop¨®sitos de regresar a la vida profesional en la noche del jueves, durante la presentaci¨®n de los libros Comando Madrid, de Jos¨¦ Oneto, y El a?o de la peluca, de Santiago Carrillo. Ayer por la ma?ana confirm¨® a sus colaboradores en el palacio de la Moncloa la decisi¨®n de abandonar el cargo y les anunci¨® que inmediatamente dedicar¨¢ unos d¨ªas a descansar. Pese a reiterados intentos fue imposible comunicar ayer con Feo.
Cansancio
En las ¨²ltimas semanas, y en conversaciones particulares, empez¨® a exteriorizar su cansancio ante la reducci¨®n de sus competencias operativas y una presumible p¨¦rdida de la confianza del presidente del Gobierno.
Eduardo Serra, responsable del ¨¢rea econ¨®mica del Ministerio de Defensa, las negociaciones para la adquisici¨®n de armas y la promoci¨®n de la industria b¨¦lica, dirigir¨¢ la Fundaci¨®n Antidroga, presidida honor¨ªficamente por la reina Sof¨ªa. Serra declar¨® a este peri¨®dico que lleva ya seis a?os en el cargo y que le parece exagerado compremeterse por otros cuatro m¨¢s. "Mi vida no son las armas", ha dicho a este diario. Su sustituto no ha sido decidido todav¨ªa por el titular del departamento, Narc¨ªs Serra, pero en c¨ªrculos del ministerio se apuesta por Jos¨¦ Ignacio Moscoso del Prado, actual director general de Asuntos Econ¨®micos.
La noticia del relevo de Serra fue difundida a mediod¨ªa de ayer por Lluis Reverter, director general de Relaciones Informativas de la Defensa, quien se apresur¨® a decir que "no hay nada extra?o" en la decisi¨®n. Reverter dijo que, ya hace un mes, Eduardo Serra le coment¨® al ministro su deseo de dejar el cargo para aceptar la oferta que le hab¨ªan hecho.
Serra se considera "encantad¨ªsimo" con el puesto que ocupa y asegura que se lleva "inejor que bien" con Narc¨ªs Serra, que le ha dado en todo momento "autonom¨ªa y respaldo", pero tambi¨¦n comenta que su techo pol¨ªtico es precisamente la Secretar¨ªa de Estado. Cabe se?alar al respecto que Eduardo Serra no es militante del PSOE, hecho que ha originado cr¨ªticas internas en el partido por parte de quienes entienden que un cargo de tanta importancia no debe estar en manos. de alguien que no es miembro del partido en el poder.
Adem¨¢s, Eduardo Serra se?ala que los proyectos de mayor envergadura en el departamento ya se han puesto en marcha, por lo que tiene menos aliciente continuar en una labor que, poco a poco, se va convirtiendo el algo rutinaria.
Serra dejar¨¢ su puesto despu¨¦s de concluida la reuni¨®n del ministros del Grupo Europeo Independiente de Programas (GEIP), prevista inicialmente en Sevilla.
Adem¨¢s de coincidir con la campa?a electoral, el abandono de Eduardo Serra se produce en un momento de viva pol¨¦mica pol¨ªtica sobre la venta de armas espa?olas a pa¨ªses en conflicto. Fuentes del Ministerio de Defensa y el propio Eduardo Serra han insistido en que su decisi¨®n no guarda relaci¨®n alguna con ese hecho.
Hombres de dif¨ªcil susutituci¨®n
La postergada decisi¨®n de Julio Feo de abandonar su cargo en Moncloa se ha materializado y ahora el presidente del Gobierno se enfrenta con el problema. "Sustituir a este hombre va a ser muy dif¨ªcil para el presidente" manifest¨® ayer un alto cargo de Moncloa que conoce la amistad personal y confianza profesional que unen a Feo con el presidente del Gobierno.Entre las misiones del secretario general de Moncloa estaba la de "conceptuar y traducir" los informes secretos que llegaban desde Defensa, Exteriores e Interior para el presidente Gonz¨¢lez.
Seg¨²n fuentes gubernamentales, es probable que por el momento permanezca vacante el puesto, ya que no existe una decisi¨®n sobre la conveniencia de designar a otra persona para el cargo o la disposici¨®n a dejar que las funciones que realiza el equipo encabezado todav¨ªa por
Feo quede subsumido en otra dependencia del palacio de la Moncloa. La marcha del secretario ge neral del presidente Gonz¨¢lez no parece que tendr¨¢ repercu siones en el gabinete particular del l¨ªder socialista, a juzgar por la ausencia de previsi¨®n de un sustituto y por la nutrida com posici¨®n del equipo de asesoramiento que, bajo las directrices de Alfonso Guerra, dirige Ro berto Dorado.Sin sorpresa Aunque la noticia del abando no de Julio Feo no ha cogido en absoluto de sorpresa a los altos cargos del Palacio de la Mon cloa, algunos reconocieron ayer que el anuncio de la decisi¨®n es taba previsto para despu¨¦s de las elecciones del 10 de junio, aunque el propio Feo hab¨ªa em pezado hace d¨ªas a exteriorizar en ¨¢mbitos restringidos lo que ya hab¨ªa comunicado a Felipe Gonz¨¢lez hace m¨¢s de un mes. Su cese como secretario general no ser¨¢ aprobado en la pr¨®xima reuni¨®n del Consejo de Ministros, el viernes que viene y cuando se produzca no ir¨¢ acompa?ado muy probablemente del nombramiento de un sustituto para el cargo. El anuncio de su cese muestra, en opini¨®n de fuentes gubernamentales, que carec¨ªan de fundamento los rumores que circularon hace varios meses, seg¨²n los cuales Feo estaba en camino de. convertirse en coordinador y destinatario de las investigaciones e informes policiales solicitados, o de inter¨¦s, para la presidencia del Gobierno. Con respecto al anuncio de Eduardo Serra de abandonar la Secretar¨ªa de Estado de Defensa, en fuentes del departamento se afirma que tambi¨¦n ser¨¢ dif¨ªcil encontrar una persona que conozca en profundidad el complejo mundo de la compraventa de armas. Su posible sustituto, Jos¨¦ Ignacio Moscoso, ha sido su m¨¢s directo colaborador en las negociaciones con Estados Unidos para ampliar este a?o el cr¨¦dito derivado de la presencia militar estadounidense en Espa?a. Adem¨¢s, Eduardo Serra se?ala que los proyectos de mayor envergadura en el departamento ya se han puesto en marcha, por lo que tiene menos aliciente continuar en una labor que, poco a poco, se va convirtiendo el algo rutinaria. El titular del departamento, Narc¨ªs Serra, ha tenido "un comportamiento ideal", seg¨²n el propio Eduardo Serra, cuando ¨¦ste le coment¨® hace un mes su intenci¨®n de dejar el puesto. "Se limit¨® a preguntarme si lo hab¨ªa meditado y lo ten¨ªa decidido", afirma el todav¨ªa secretario de Estado.
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