Los poetas del 'medio siglo' se reunieron 30 a?os despu¨¦s para evocar sus or¨ªgenes
Faltaron Jaime Gil de Biedma, Jos¨¦ ?ngel Valente y Alfredo Costafreda, fallecido y evocado, pero estuvieron los dem¨¢s: el jovial Claudio Rodr¨ªguez y Carlos Sahag¨²n, siempre silencioso; Jos¨¦ Agust¨ªn Goytisolo, quiz¨¢ el menos protocolario, y Carlos Barral, que perdi¨® un avi¨®n y lleg¨® tarde, como, Jos¨¦ Manuel Caballero Bonald; Francisco Brines, de mente clara en d¨ªas confusos, y Angel Gonz¨¢lez, que en Asturias es un patriarca. Poetas de la generaci¨®n del medio siglo se reunieron en Oviedo desde el mi¨¦rcoles hasta el viernes para evocar, sobre todo, sus or¨ªgenes. Asisti¨® los dos d¨ªas un enviado especial de EL PA?S.
En las cerca de 12 horas de encuentros organizados, al margen de los no organizados, casi m¨¢s sugerentes, varios fueron los temas constantes. La vieja idea del poeta como ungido que no tiene comprado su futuro, por ejemplo, o las lecturas que les marcaron, que no siempre comparten. Sobre todo, la idea de generaci¨®n o sus variantes. Y, formulada de forma simplista, la licitud de que un grupo de poetas se al¨ªen para darse a conocer.Casi todos dijeron que su alianza fue sobre todo de amistad, a partir por supuesto de afinidades art¨ªsticas, intelectuales y pol¨ªticas. A un grup¨²sculo inicial en Barcelona -Gil de Biedma, Barral, Costafreda y Jos¨¦ Agust¨ªn Goytisolo- se fueron sumando los dem¨¢s, procedentes del colegio mayor Guadalupe, en Madrid, o enviados desde el c¨ªrculo de Velintonia por Vicente Aleixandre.
Tuvo gran inter¨¦s el relato hecho el jueves por Carlos Barral (que ya aludi¨® a ello en sus memorias) de c¨®mo se hizo la antolog¨ªa de Castellet, que junto con la de Garc¨ªa Hortelano fij¨® los nombres del grupo. Del relato de Barral se desprendi¨® que en la elaboraci¨®n de la antolog¨ªa, en la que Castellet decid¨ªa y Gil de Biedina, Barral y Goytisolo hac¨ªan sugerencias, influy¨® la pol¨ªtica. No qued¨® aclarada la postergaci¨®n en esa antolog¨ªa de Alfredo Costafreda, que fue recordado por Goytisolo y reivindicado en Oviedo. Una generaci¨®n m¨¢s tarde, Castellet fijar¨ªa en otra selecci¨®n el qui¨¦n es qui¨¦n de los nov¨ªsimos.
Claudio Rodr¨ªguez interrumpi¨® a menudo los debates, cuando ¨¦stos se hund¨ªan en precisiones de n¨²mero y notas a pie de p¨¢gina, para defender la emoci¨®n y el individualismo. "La poes¨ªa no es una cosa de familias, ni estrategias, ni grupos, ni de decir esto es bueno, esto es malo", dijo el jueves por la tarde. "La creaci¨®n po¨¦tica tiene que estar por encima de todas estas tonter¨ªas. Yo escribo porque salVa mi esp¨ªritu". "Pero", le dijo un colega, . ?t¨² no te sientes vinculado a ... ?". "Yo, ?vinculado a qu¨¦?", le interrumpi¨® con, emoci¨®n Rodr¨ªguez. Por la ma?ana, el profesor V¨ªctor Garc¨ªa de la Concha hab¨ªa dicho: "En este pa¨ªs, quien no entra en una generaci¨®n simplemente no sale en la foto".
No todos leyeron, admiraron ni odiaron a los m¨¢smos. Qued¨® claro el magisterio de Gabriel Ferrat¨¦, tant¨® por su poes¨ªa, escrita en catal¨¢n, como por su gusto afilado en literatura. Antonio Machado y la Generaci¨®n del 27, claro. La segunda antolog¨ªa de Juan Ram¨®n Jim¨¦nez era recitada por m¨¢s de uno. Rodr¨ªguez dijo haber sido fecundado por algunos ingleses, en sutilezas como la construcci¨®n del poema. Tambi¨¦n dijo, y eso deber¨ªa sorprender a los amantes de etiquetas estar m¨¢s cerca de Blas de Otero que de otros miembros de su grupo.
Notable fue la imbricaci¨®n del encuentro con la vida de la ciudad, y en ello influy¨® el pleno apoyo de la Prensa, y los tres recitales de los cantantes-poetas Amancio Prada, Luis Eduardo Aute y Paco Ib¨¢?ez, que agotaron las localidades del restaurado teatro Campoamor, en cuyo vest¨ªbulo se expon¨ªan fotos y cronolog¨ªas del grupo. El encuentro estuvo organizado por la asociaci¨®n Tribuna Ciudadana, con el apoyo de varias entidades.
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