Levando anclas y lavando calles

Estoy harto de ser como el Betis, que ense?a a jugar pero siempre pierde.Y tambi¨¦n:

-Estoy harto de ser el jefe de la oposici¨®n en el Ayuntamiento, de que vengan a decirme que votan a AP, pero, en cuanto se enteran de que quien da los pisos es Barranco, se marchan a otra ventanilla.

De Jos¨¦ Mar¨ªa Alv¨¢rez del Manzano nadie habla mal. "Es como el Manzanares", te dicen. "Tan puro que se le pueden poner patos". Al natural sale m¨¢s favorecido que en el poster, menos redondeado y, desde luego, simp¨¢tico. Tiene 49 a?os y naci¨® en Sevilla, aunque le trajeron a Madrid siendo muy chico. Y es muy cauto:

-No puedo ni quiero prometer nada, salvo trabajar y buscar trabajo para la gente.

-?Y eso es tarea del Ayuntamiento?

-Eso no es tarea del Ayuntamiento, porque est¨¢ mal hecha la ley de R¨¦gimen Local, la ley de Bases, y pienso que hay que hacer lo posible para que los ayuntamientos sean la plataforma desde la cual se puedan resolver los problemas de los vecinos. Que all¨ª est¨¦ la palanca adecuada para todo, desde protestar a conseguir cosas. Segundo: acabar con el chabolismo. Mientras haya en Madrid una persona que viva en condiciones indignas, yo me sentir¨¦, en conciencia, con la urgencia de resolver ese problema.

-Habla usted como si el chabolismo fuera algo de ahora. Este repentino inter¨¦s, ?de qu¨¦ le viene?

-En m¨ª, es de a?os. Yo me fui al Pozo del T¨ªo Raimundo, y el padre Llanos lo podr¨¢ atestiguar, para ayudar en la medida en que un estudiante pod¨ªa hacerlo. Toda mi vida he tenido una honda preocupaci¨®n social. Yo soy un cristiano haciendo pol¨ªtica.

As¨ª, el cristianismo le llev¨® de UCD al PDP y finalmente a AP.

-Un cristiano curioso. En el Ayuntamiento ha hecho usted el vilipendiado papel de escriba de los evangelios. Porque estaba en Hacienda, qu¨¦ barbaridad.

-Bueno, en parte s¨ª y en parte no. Yo soy inspector de Hacienda, un cuerpo de elite, pero tengo muy a gala cumplir muy bien con mi obligaci¨®n y al mismo tiempo ser muy amable. Entre otras cosas, porque me gusta.

-Mano de hierro y guante de seda.

-Exacto. ?sa ha sido siempre mi pol¨ªtica.

-Pero acaba fastidiando lo mismo.

-No, porque si lo haces con buenos modos, la gente te lo agradece.

Se queja de que el CDS le ha copiado la oferta de congelaci¨®n de impuestos al contribuyente. "Si votan, que voten al original, que somos nosotros. Aunque me encanta que los dem¨¢s partidos me copien". Despierta simpat¨ªa el candidato a la alcald¨ªa de Madrid por AP, que por fidelidad a Jos¨¦ Luis ?lvarez se qued¨® en el Ayuntamiento cuando UCD ya estaba deshecha y "sin saber a qui¨¦n entregar la llave". Pero siempre hay, un roto para un descosido, o un sitio para un cristiano -"porque yo siento la pol¨ªtica como una realizaci¨®n m¨¢s de la inspiraci¨®n de hacer algo por los dem¨¢s, que surge en el evangelio"-, y aqu¨ª le tienen, hecho un brazo de mar, bregando y aguantando el tipo, recibiendo el fervor de quienes quieren que la calle sea suya.

-Sigo insistiendo en que querer hacer algo por los dem¨¢s y estar en Hacienda me parece una incongruencia.

-No, que san Mateo era recaudador.

-Por eso todos preferimos a san Juan.

R¨ªe, se r¨ªe mucho: "Yo, en el fondo, tambi¨¦n. Aunque la santa patrona nuestra es la Virgen del Perpetuo Socorro". Lo cual, le digo, no deja de tener su gracia, considerando que es la favorita de Ruiz-Mateos.

-Entiendo que, como cristiano, es usted contrario al aborto.

-Desde luego, yo soy un defensor de la vida, estoy contra la pena de muerte.

-Pero ha sido usted casi torero.

-?Nunca llegu¨¦ a estoquear!

Se queda reflexivo: "Claro que hago pesca submarina". "Qu¨¦ espanto. Con fusiles arponeros y todo eso". "S¨ª", confiesa, cabizbajo. "Y mira que soy incapaz de cazar una perdiz. Pero cuando veo un pez entre las rocas...", reconoce, "me da un no s¨¦ qu¨¦".

-Mire que si despu¨¦s de tanto atacar el aborto resulta que ha matado usted a m¨¢s de una pescada en estado de buena esperanza...

-Por Dios -palidece- No me digas eso.

RUIZ GALLARDON

El d¨ªa que en los dulces pongan cromos de los pol¨ªticos, todos se parecer¨¢n a Alberto Ruiz Gallard¨®n, que tiene cara de pol¨ªtico de chocolate y un inter¨¦s pero que muy fuerte en parecer indestructible, esfuerzo que le lleva a hablar en voz muy alta, as¨ª como din¨¢mico -un poco a lo Julio Iglesias, que cuando acaba de responderte a una pregunta te suelta un inmediato "?qu¨¦ m¨¢s?"-, aunque de cuando en cuando se le escapa un gallo que ni Vicente Sardinero en sus peores noches. Yo creo que este hombre, por ese af¨¢n de parecer de m¨¢s edad, est¨¢ teniendo tambi¨¦n muchos hijos y muy seguidos. Ha cumplido veintinueve a?os y acaba de tener el que hace el n¨²mero tres. "Es que soy muy criaturero", chilla.-Estoy muy contento porque las cosas van muy bien.

-Intente resumir su oferta para la Comunidad de Madrid.

-Eficacia, austeridad y racionalidad, punto.

-Ni tanto ni tan calvo, hombre.

-La Comunidad tiene que servir para algo, no tiene una tradici¨®n hist¨®rica que la justifique, como la catalana o la vasca. El madrile?o, aunque ha sido v¨ªctima del centralismo, solamente lo cambia por un sistema auton¨®mico m¨¢s eficaz, m¨¢s barato y, sobre todo, m¨¢s pr¨®ximo a ¨¦l. Desde el mismo momento en que t¨² le pidas que por razones pol¨ªticas, para mantener el sueldo a un presidente o a determinados consejeros, o como quieras, tiene que pagar un plus sobre su carga impositiva, ¨¦l te dice que no. Entonces, nosotros queremos hacer una autonom¨ªa que se base en estos criterios: tiene que ser m¨¢s eficaz que una administraci¨®n central porque, de lo contrario, prefiere ir al ministerio de: turno. Y no s¨®lo tiene que ser m¨¢s pr¨®xima y m¨¢s inmediata, sino m¨¢s efectiva a la hora de resolver los problemas. Para eso tiene que ser m¨¢s barato. Lo que yo nunca har¨¦ es gastarme un duro para componer un himno para la Comunidad de Madrid.

-Por cierto, ?se lo sabe?

-No tengo ese disgusto. S¨ª me gastar¨ªa el dinero en crear una plaza m¨¢s en el Conservatorio para meter un profesor nuevo o un alumno.

Y a?ade: "Adi¨®s a la autopropaganda, a la publicidad". Le pregunto s¨ª la campa?a desgasta y dice que fi?sicamente s¨ª, "pero como persona te enriquece, ?por qu¨¦ te iba a desgastar?, s¨ª en definitiva lo que hace es proyectar hacia fuera el mensaje del partido, las siglas de AP, y en segundo lugar a la persona, que de repente se exterioriza. Yo nunca repito la misma historia, si hay que dar ? o 40 m¨ªtines, tenemos temas m¨¢s que de sobra para llenarlos. Y las cosas importantes, aunque las repitas no importa".

-?Es el PSOE el principal enemigo, o el CDS?

-Yo voy a pescar a un r¨ªo donde hay truchas, y es evidente que quien las tiene es el PSOE.

Pescadores me han salido este par de pol¨ªticos.

-?Su vida familiar se resiente?

-Es un sacrificio compartido, un compromiso establecido de anteniano. Yo a mi mujer nunca la he llamado a enga?o, y ella. siempre ha sido muy solidaria. Acabarnos de tener un hijo y es evidente que es ahora cuando las mujeres necesitan m¨¢s a su marido. Pero mi mujer se da cuenta perfectamente de por qu¨¦ tengo que irme a las siete de la ma?ana y volver a media noche, y que lo estoy haciendo por algo, no m¨¢s importante, pero s¨ª m¨¢s trascendente que lo que puede ser la propia comunidad familiar.

-A usted, aparte de saltar en paraca¨ªdas, ?qu¨¦ le gusta?

-Todo, me gusta todo.

-Esto, ejem, ?ha echado usted alguna vez una canita al aire?

-Depende de lo que entiendas por canita al aire.

-Salirse de madre.

-Depende de lo que entiendas por eso.

-Perder el control.

-Mira, t¨² est¨¢s en tu derecho al pregunt¨¢rmelo, y yo en mi derecho al no darte pistas. Es que, respecto a m¨ª, hay muchas ideas. Como ¨¦sa de que soy un empoll¨®n, no s¨¦de d¨®nde ha salido.

-Hombre, cara de empoll¨®n s¨ª que tiene. De peque?o, ?nunca le pegaban por eso?

-Me pegaban y pegaba yo tambi¨¦n.

-Volviendo a lo de antes: ?qu¨¦ le parece lo de Gary Hart? ?Se ve en su lugar?

-Lo de Hart no es por lo que hizo, sino por haber mentido. En este sentido, la sociedad espa?ola es mucho m¨¢s liberal.

-?Y usted?

-Pero, bueno, ?qu¨¦ te crees? ?Que soy perfecto? ?No soy Superman!

-En cualquier caso, es usted el candidato que m¨¢s se parece a Clark Kent.