La Real Sociedad y el Athl¨¦tic decepcionaron en Atocha
La v¨ªspera hab¨ªa habido un fuego cruzado de declaraciones entre Ir¨ªbar y Arconada. Se aceptaba como sabido el hecho de que el Athl¨¦tic no estaba bien, pero Ir¨ªbar fue m¨¢s all¨¢ y aventur¨® que tampoco lo estaba la Real, bas¨¢ndose en la goleada que recibi¨® ante el Betis y en su flojo rendimiento contra el Valladolid. Y lo que el entrenador del Athl¨¦tic utiliz¨® como una treta para poner nervioso a su rival termin¨® siendo una verdad expuesta en toda su extensi¨®n sobre el c¨¦sped. Pero, en todo caso, tampoco su equipo fue capaz de imponerse a uno poco imaginativo y que tuvo la desgracia de actuar en la ¨²ltima cuarta parte del encuentro con diez jugadores por lesi¨®n de Loren tras los dos cambios, mientras que posteriormente Santi Bakero tambi¨¦n acus¨® algunas molestias y termin¨® como figura decorativa.El partido fue bronco y copero, pero sin mala intenci¨®n. De haber un vencedor, ¨¦ste debi¨® ser el Athl¨¦tic, que dispuso de m¨¢s ocasiones claras que la Real. No obstante, la primera fue para Zamora, que comenz¨® su desangelada noche fallando un gol solo ante Biurrun. En algunas fases del primer tiempo, el Athl¨¦tic presion¨® a la Real e incluso se puede decir que lleg¨® a dominar. Urtubi envi¨® un bal¨®n lamiendo el larguero de Arconada, mientras que Biurrun s¨®lo ten¨ªa que lucirse mostrando sus reflejos ante un remate de cabeza de Jos¨¦ Mar¨ªa Bakero.
En la segunda mitad, adem¨¢s de desaciertos, la Real acumul¨® desgracias con las lesiones de Zubillaga, Loren y Santi Bakero. Pero ni as¨ª fue capaz el Athl¨¦tic de imponerse. Pareci¨® guardar sus mejores energ¨ªas para San Mam¨¦s, mientras la Real dejaba pasar los minutos de aquel calvario sin acercarse una sola vez a los dominios de Biurrun y pensando que dentro de una semana tendr¨¢ mejor fortuna. Ni la presencia de L¨®pez Ufarte dio m¨¢s profundidad al nulo ataque realista. No pudo ser de otra manera y el 0-0 fue justo, un elocuente monumento a la nada futbol¨ªstica m¨¢s absoluta.
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