Un intento de profesionalizaci¨®n

C. Y. Las reformas que se realizan en el Ej¨¦rcito tienen como fin ¨²ltimo elevar el nivel profesional de las unidades y, por tanto, de sus integrantes, tanto de los mandos como de los soldados. En los ¨²ltimos a?os, ha sido desarticulado un Ej¨¦rcito concebido como fuerza de ocupaci¨®n del pa¨ªs y hoy se trata de crear ¨²nas unidades operativas que realmente- sirvan para la misi¨®n que la Constituci¨®n fija para las Fuerzas Armadas, es decir, la defensa del territorio ante hipot¨¦ticos enemigos exteriores.

El jefe del Estado Mayor del Ej¨¦rcito, teniente general Miguel ??iguez del Moral, tiene entre sus objetivos prioritarios cerrar el nuevo despliegue de las unidades y disponer al completo -en medios humanos y materiales- precisamente de aquellas unidades concebidas para intervenir en primera l¨ªnea en cualquier conflicto.

Paralelamente, en los pr¨®ximos meses se enviar¨¢ al Congreso de los Diputados la Ley de la Funci¨®n Militar, en la que quedar¨¢ dise?ada la carrera militar.

A partir de la aprobaci¨®n de esa ley, ser¨¢ la val¨ªa profesional, por encima de la antig¨¹edad -aunque ¨¦sta seguir¨¢ influyendo- la que determine gran parte de los ascensos o la consecuci¨®n de determinados destinos.

Sin embargo, muchos de los objetivos del Estado Mayor del Ej¨¦rcito, especialmente en el cap¨ªtulo de material han sido frenados por problemas presupuestarios.

El n¨²mero de mis¨ªles para defensa ant¨ªa¨¦rea ha sido reducido pr¨¢cticamente a la n¨²tad de los previstos en el inicial Objetivo de Fuerza del Plan Estrat¨¦gico Conjunto, "aunque el propio Gobierno ha asumido ese riesgo", aseguran en'el Estado Mayor. El proyecto de construir un nuevo carro de combate en Espa?la ha sido frenado y se prev¨¦ dotar a dos batallones de unidades de Intervenci¨®n R¨¢pida con carros de segunda mano mejorados.