El resbal¨®n del 'elefante rojo'

La derrota del Partido Comunista italiano (PCI), que, con el 26,9% de los sufragios emitidos los d¨ªas 14 y 15 de junio, ha tocado un m¨ªnimo hist¨®rico, sigue siendo, junto con los ascensos socialista y verde, objeto de discusi¨®n y an¨¢lisis entre las fuerzas pol¨ªticas y en la misma calle. Valentino Parlato, director de Il Manifesto, reflexiona, en una conversaci¨®n con EL PA?S, sobre la crisis del elefante rojo.Hasta Il Manifesto, el diario comunista independiente surgido de la expulsi¨®n de un grupo de dirigentes del PCI, tendi¨® una mano al liderazgo del secretario del PCI, Alessandro Natta, al ceder para las listas de ¨¦ste, como independiente de izquierdas, a Luigi Pintor, de quien dec¨ªa Enrico Berlinguer que era el mejor periodista pol¨ªtico italiano. Pintor ha sido elegido, pero el partido ha sido derrotado.

Una de las esperanzas de Parlato, agudo observador pol¨ªtico y uno de los fundadores de Il Manifesto, es, desde siempre, la de "no morir democristiano". ?Y ahora? "Parad¨®jicamente", dice, "tengo hoy mayores esperanzas que ayer". "Y la raz¨®n es que en esta gran confusi¨®n de la pol¨ªtica italiana siento como un olor fuerte a crisis del viejo r¨¦gimen".

Curiosamente, dice, mientras el PCI sufre un retroceso inesperado, pero temido, hoy por vez primera existe en el Parlamento una mayor¨ªa de izquierda progresista, del 50,5%. Seg¨²n Parlato, el PCI es hoy el ¨²ltimo partido comunista del mundo, ya que ni siquiera se puede llamar as¨ª al PCUS de Mijail Gorbachov.

El peligro que hoy corre la formaci¨®n de Natta es, en su opini¨®n, que puedan confluir en ¨¦l tanto el fantasma del Partido Comunista de Francia, con su sectarismo, como el del espa?ol, con su fragmentaci¨®n.

Hoy el PCI, seg¨²n el director de II Manifiesto, tiene ante s¨ª dos posibilidades: un enderezamiento en la l¨ªnea de los filoberlinguerianos, que propugnar¨¢n ahora un acercamiento a la clase obrera olvid¨¢ndose de que ¨¦sta ya no es la de anta?o, o bien una apertura en clave posibilista en la l¨ªnea de Giorgio Napolitano y Luciano Lama, es de de los filosocialistas.

Estos piensan que la derrota ha sido provocada no tanto por la crisis del sindicato comunista, que era el pulm¨®n del PCI, sino m¨¢s bien por la batalla de vieja memoria berlingueriana contra Craxi y su partido. Pero el problema es que estos ¨²ltimos querr¨ªan volver a una socialdemocracia que precisamente hoy est¨¢ en crisis en otros pa¨ªses, desde la Rep¨²blica Federal de Alemania hasta el Reino Unido. Todo ello sin contar con los viejos nost¨¢lgicos del compromiso hist¨®rico, la alianza de los comunistas con las fuerzas progresistas cat¨®licas. A esta crisis de los grupos internos hay que a?adirle adem¨¢s, seg¨²n Parlato, la intensa crisis de identidad que zarandea desde hace tiempo al partido de Natta y que ha impedido esta vez, no s¨®lo a los obreros de las grandes f¨¢bricas, sino tambi¨¦n a los j¨®venes, votar por el elefante rojo.

"En realidad", confiesa el director de Il Manifesto, "incluso muchos de nuestros amigos de la izquierda no sab¨ªan si votando partido comunista se votaba por una alternativa de izquierdas o por un compromiso con la Democracia Cristiana". Todo ello s¨®lo beneficia, seg¨²n Parlato, a Craxi, quien se encuentra con las puertas abiertas para el asalto de la diligencia en su af¨¢n de colocarse como el verdadero partido de la izquierda moderna y reformista de Italia.

?Podr¨ªa ser una crisis irreversible? "La derrota ha sido fuerte y los camaradas de Natta deber¨¢n ahora reflexionar seriamente, ya que cuando se empieza a resbalar existe siempre el peligro de acabar con los huesos en el barranco", responde Parlato.