Hunosa perder¨¢ este a?o 9.000 millones de pesetas m¨¢s que en 1986, seg¨²n su presidente
El presidente de Hunosa, Juan Tesor¨®, ha manifestado que las p¨¦rdidas de la sociedad en el presente ejercicio pueden ascender a unos 48.000 millones de pesetas, frente a los 39.091 del pasado a?o, a causa de los costes financieros derivados de la ausencia de un contrato-programa y de la conflictividad registrada en los primeros meses del a?o.
Hunosa, cuyo ¨²ltimo contrato-programa con el Estado caduc¨® con el plan trienal el 31 de diciembre pasado, ha acumulado desde entonces, seg¨²n su presidente, un d¨¦ficit de tesorer¨ªa de 18.000 millones de pesetas. "Se est¨¢n inflando los costes financieros como consecuencia de los cr¨¦ditos negociados para conseguir el dinero que, con un contrato-programa, recib¨ªriamos como subvenci¨®n", declar¨® el presidente de la compa?¨ªa, Juan Tesoro.La financiaci¨®n de Hunosa, sin un contrato-programa en vigor que garantice las subvenciones estatales, preocupa seriamente al INI y a la propia empresa, seg¨²n Tesoro. La negociaci¨®n del contrato-programa est¨¢ supeditada a la concertaci¨®n con la plantilla del plan de futuro y convenio colectivo.
Las conversaciones entre empresa y sindicatos permanecen interrumpidas desde la madrugada del 23 de mayo. No obstante, la direcci¨®n de Hunosa pretende .agotar los plazos de tiempo para conseguir que alguna de las fuerzas representadas en la comisi¨®n negociadora firme la ¨²ltima propuesta de plan de viabilidad y convenio colectivo", seg¨²n Juan Tesoro, quien explic¨® que tanto a Hunosa como al INI, socio ¨²nico de la compa?¨ªa minera, les "preocupa c¨®mo negociar con el Gobierno un nuevo contrato-programa sin haber alcanzado antes acuerdo alguno con los trabajadores, despu¨¦s de cinco meses de negociaci¨®n. "Sin un plan concertado con los trabajadores no hay contrato-programa, y sin contrato-programa no hay subvenciones, y sin subvenciones no hay empresa", a?adi¨® Tesoro.
Negociaci¨®n paralizada
La negociaci¨®n iniciada a mediados de enero concluy¨® en la madrugada del 23 de mayo pasado cuando la empresa present¨® la ¨²ltima y definitiva propuesta de plan de futuro y convenio colectivo, en la que se compromete a unas subvenciones de aqu¨ª al a?o 2000 de 450.000 millones de pesetas e inversiones por valor de otros 150.000 millones de pesetas; la producci¨®n de cien millones de toneladas brutas de carb¨®n, y entre 50 y 60 millones de mineral lavado; la reducci¨®n de las p¨¦rdidas en 1995 a 25.000 millones de pesetas; el incremento de la productividad a raz¨®n de un 5% de ritmo medio anual acumulativo; la reducci¨®n de la plantilla, actualmente formada por cerca de 21.000 trabajadores, en 2.000 mediante jubilaciones anticipadas y bajas vegetativas; y un aumento salarial equivalente al 100% del IPC real de 1987, el 105% en 1988 y el 110% en 1989.CC OO se opone a la firma de un plan de futuro que contemple la reducci¨®n de la plantilla, mientras que el SOMA-UGT y varias asociaciones profesionales, aunque valoran favorablemente la ¨²ltima propuesta de la empresa, no firmar¨¢n acuerdo alguno si no lo hace CC OO, fuerza actualmente mayoritaria en la empresa, porque carecer¨ªa, a su juicio, de viabilidad.
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