Ocho familias llevan luchando seis a?os contra el ruido de un bar

Un comunidad de inquilinos integrada por ocho familias lleva seis a?os librando una infatigable batalla contra los ruidos "enloquecedores" que produce un pub situado en el bajo del edificio donde residen.En numerosas ocasiones han denunciado la situaci¨®n a las autoridades, "pero la polic¨ªa llega, nos da la raz¨®n, habla con el due?o del bar, y luego se marcha y ah¨ª termina todo el asunto", seg¨²n afirma el secretario de la comunidad, Guillermo de la Torre, de 79 a?os, quien es el m¨¢s afectado por el problema, pues vive en la primera planta del inmueble, justo encima del establecimiento.

La batalla se inici¨® en 1981, cuando los inquilinos del edificio situado en la calle de Gutierrez de Cetina, n¨²mero 33, enviaron una carta a la Junta Municipal de Ciudad Lineal en la que manifestaban no haber sido consultados previamente de la instalaci¨®n de un pub, que en ese momento se encontraba en obras, en el bajo del inmueble. Seg¨²n De la Torre, no se obtuvo respuesta.

El establecimiento, llamado Palmira, comenz¨® a funcionar, y los vecinos, a protestar por todos los medios, como se puede comprobar en una abultada carpeta que contiene copias de una veintena de actas que ha levantado la Polic¨ªa Municipal en sus visitas al lugar. El representante de los inquilinos manifiesta que los agentes han subido a algunos pisos y comprobado la intensidad del ruido a altas horas de la madrugada.

Las dudas de Granizo

Entre los documentos contenidos en la carpeta figura la copia de un oficio enviado en abril de 1983 por la Junta de Ciudad Lineal al propietario del pub, en el que se le se?alaban algunas deficiencias t¨¦cnicas y se le pon¨ªa de manifiesto que el negocio carec¨ªa de la preceptiva licencia de funcionamiento. El pub recibi¨® posteriormente la licencia.El concejal presidente de la Junta Municipal de Ciudad Lineal, Victorino Granizo, manifest¨® al respecto que es un "asunto pol¨¦mico, pues se trata de saber qui¨¦n tiene la raz¨®n y qui¨¦n no la tiene". Agreg¨® que "por encima de todo est¨¢ la ley, y si el establecimiento tiene licencia y cumple las normas tengo que atenerme a ella".

Granizo reconoci¨® que recientemente se hab¨ªa reunido con los inquilinos del inmueble, pero no recordaba exactamente lo discutido. Guillermo de la Torre confirm¨® que hace dos meses se celebr¨® ese encuentro, en la sede de la junta de distrito, "y el concejal se comprometi¨® a resolver el problema, pero tampoco ha pasado nada".