Asesores
Yo quiero ser asesor. El Gobierno tiene un presupuesto de 1.400 millones para contratar asesores. Yo quiero asesorar algo, asesorar en algo, y lucrar ese presupuesto, aunque sea modestamente. La cuarta parte de los nombramientos de asesores son "de libre designaci¨®n". Ah¨ª es donde entra uno. Antes, Madrid era una ciudad de bur¨®cratas. Hoy es una ciudad de asesores. Ser asesor es m¨¢s que ser bur¨®crata y es mejor que ser pol¨ªtico, porque es como estar y no estar en la pol¨ªtica. Estar de estrella invitada, quiere decirse. Y uno va por la vida de estrella invitada o no va, que si no se est¨¢ mejor en Majadahonda, un respiro, como dice el slogan. La Administraci¨®n Central cre¨® m¨¢s de 53.000 puestos el a?o pasado. ?Y es que entre tanto personal no voy a tener yo un hueco de asesor, cuando hasta he pegado carteles por la democracia y he movido pancartas en las manifestaciones, con Pilar Mir¨® y Manuel Viola? (Cuando he faltado a la pancarta y la manifestaci¨®n, siempre era porque estaba "trenzado en m¨²ltiples lazos", que m¨¢s o menos dice el poeta.) As¨ª hicimos la revoluci¨®n/cambio, la transici¨®n/ruptura: entre el adulterio y el antiotanismo. Voy a echar una instancia (ya tengo las p¨®lizas, que ahora se llaman de otra forma) para que me hagan asesor de algo. ?Y en qu¨¦ podr¨ªa yo asesorar al Gobierno? Digamos que uno, romo el cl¨¢sico, es "especialista en ideas generales". Pero tambi¨¦n podr¨ªa asesorar sobre cosas concretas. Un suponer: ?hay que cesar a Barrionuevo o a Leguina? A Barrionuevo, porque Leguina se peina mejor. ?A qui¨¦n hay que darle el pr¨®ximo premio Cervantes? A Vizca¨ªno Casas, porque ha conseguido sepultar al Caudilo bajo diez o veinte tomos de prosa pertinaz. ?A qui¨¦n hay que proponer para el premio Nobel de la Paz? A los salvajes que flechan misioneros, porque el misionero va a robarles la fe, su fe, siendo as¨ª que toda fe vale, todas las fes son la misma y resumen la noble perplejidad del hombre ante el Universo. ?Qui¨¦n debe suceder a Marcelino Camacho en Comisiones? Nicol¨¢s Redondo. ?Qui¨¦n debe hacer los bustos oficiales: Chillida o Santiago de Santiago? Este ¨²ltimo, naturalmente, que cuida una melena de artista mucho m¨¢s vistosa que el pelado pel¨®n de Chillida. ?Qui¨¦n enviar a Suram¨¦rica como mensajero de la Espa?a socialista? Hern¨¢ndez Mancha, que ya ha ido por su cuenta. Como ven, tengo contestaci¨®n para todo.Ya que no me han hecho de Estrasburgo, que me hagan asesor, please, que esto de los art¨ªculos da para poco. ?Qu¨¦ podemos hacer por la memoria de Joan Mir¨®? Esperar a que los franceses le den la Legi¨®n de Honor a su viuda, que ya se la han dado. ?C¨®mo acabar con la jet de Marbella? Pensionando a todos los jubilados y jubiladas de Espa?a en el Marbella Club, de don Alfonso Hache. ?C¨®mo acabar con ETA? Poni¨¦ndonos todos un pasamonta?as, para desorientarles. ?C¨®mo soportar el tedio de que el Papa vaya consagrando a media Espa?a franquista, de tres en tres? Consagr¨¢ndolos aqu¨ª en bloque, entre don Marcelo y AP. ?C¨®mo cogerle el punto a la paella tur¨ªstica para no perder divisas? Ech¨¢ndole m¨¢s colorante. ?Qu¨¦ hacer con las religiosas de clausura espa?olas que necesitan ayuda? Ponerlas a todas a tricotar jerseis gordos para Marcelino Camacho. Yo creo que estoy muy puesto para asesor, o sea que ahora a ver.
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