Floyd Abrams

Floyd Abrams, abogado neoyorquino, cita con orgullo no disimulado su trabajo, hace 16 a?os, como defensor de la Prensa -concretamente, de The New York Times- en el caso de los papeles del Pent¨¢gono. Por la participaci¨®n en este conflicto de repercusiones internacionales y por su trayectoria, est¨¢ considerado como uno de los m¨¢ximos especialistas en materia de libelo en su pa¨ªs. Abrams, que cultiva tambi¨¦n la ense?anza universitaria, dice que se siente muy atra¨ªdo por las relaciones entre tribunales y Prensa.

Queda lejos el caso de los papeles del Pent¨¢gono, que precedi¨® al del Watergate, y por esta raz¨®n no quiere extenderse en recordarlos. No obstante, admite Abrams que "estos dos sucesos hicieron que la Prensa de Estados Unidos alcanzara las m¨¢ximas cotas de credibilidad, que ahora ya no conserva".En la ¨²ltima d¨¦cada ha aparecido siempre detr¨¢s de algunos de los casos m¨¢s significativos de conflictos entre medios de comunicaci¨®n y los tribunales, especialmente con el Tribunal Supremo, como los de la Nebraska Press Association; Landmark Communications, Daily Mail, Warner Communications, Metromedia, CBS y The Nation.

De su experiencia tambi¨¦n como defensor de la primera enmienda de la Constituci¨®n americana, referida a la completa libertad de expresi¨®n, Floyd Abrams deduce que "hay que guardarse mucho de las amenazas que suponen los Gobiernos para la libertad de Prensa". "Los Gobiernos nunca solucionan los problemas de libertad de expresi¨®n; no son la soluci¨®n, sino, por el contrario, el verdadero problema", dice.

Nacido en Nueva York en 1936, casado, con dos hijos, ejerce de abogado desde 1960, a?o en que se gradu¨® en la universidad de Yale. Paralelamente ha sido profesor en varias universidades, especialmente en la de Columbia, donde ha ense?ado en la escuela de periodismo y, actualmente, es profesor de la facultad de Derecho.

Recientemente se ha referido en un curso de la Universidad Internacional Men¨¦ndez Pelayo, "al sistema abierto y vigoroso de libertad de expresi¨®n de Estados Unidos, en el que est¨¢ desterrado todo tipo de censura previa o presiones de los jueces para que no se publique una cosa". Pero a pesar de esta libertad pr¨¢cticamente absoluta, parece que la Prensa "no las tiene todas consigo".

Y pone un ejemplo: "En el caso Irangate, la Prensa ha ido por detr¨¢s de los acontecimientos. Todos han apoyado a Oliver North, que se estaba convirtiendo en una estrella despu¨¦s de sus apariciones en televisi¨®n. S¨®lo al final la Prensa ha reaccionado y ha sido medianamente cr¨ªtica con este se?or. Parece que los periodistas y editores tuvieran miedo a determinadas actitudes populares frente a los medios de comunicaci¨®n".

Floy Abrams analiza por otra parte con optimismo la situaci¨®n espa?ola. "Trabajo en el campo de los derechos humanos internacionales y debo decir que, desde una perspectiva internacional, la restauraci¨®n democr¨¢tica en Espa?a supone un ejemplo extraordinario y poco usual para todo el mundo. Es posible que en determinados terrenos concretos de la vida interior de este pa¨ªs, como es el de las relaciones de la Prensa con los tribunales, las cosas no vayan tan bien, pero no se puede hablar de violaciones de derechos humanos".