Puntos oscuros
"Una investigaci¨®n preliminar indica que Rudolf Hess intent¨® poner fin a su vida", reza el ¨²ltimo comunicado publicado ayer en Berl¨ªn Oeste por las cuatro potencias aliadas, que contradice las primeras notas oficiales y muestra los puntos oscuros que subyacen sobre la muerte del n¨²mero t¨ªos de Hitler.
Seg¨²n este comunicado, "en la tarde del 17 de agosto, Hess, como sol¨ªa hacer, sali¨®, escoltado por un oficial de prisiones, a sentarse en una peque?a caba?a en el jard¨ªn de la prisi¨®n; al mirar en la caba?a algunos minutos despu¨¦s, el guardi¨¢n encontr¨® a Hess con un cable el¨¦ctrico alrededor del cuello".
"Se adoptaron medidas para hacerle volver en s¨ª y Hess fue trasladado al Hospital Militar Brit¨¢nico", se a?ade. All¨ª, "tras varios intentos de reanimaci¨®n, fue declarado muerto a las 16:10", a?ade el comunicado.
"Las investigaciones, que incluyen una autopsia completa, siguen adelante, concluye la nota, "para determinar si este intento de suicidio fue la verdadera causa de su muerte".
Negativa sovi¨¦tica
La publicaci¨®n de este comunicado se produce tras largas horas de confusi¨®n sobre el lugar exacto de su ¨®bito. La primera nota oficial aseguraba que la muerte se hab¨ªa producido en prisi¨®n. Ello se debi¨® a la negativa de las autoridades sovi¨¦ticas a modificar el texto acordado hace ya tiempo por las cuatro potencias aliadas para el momento en que tuvieran que hacer p¨²blico el fallecimiento del ¨²ltimo prisionero de Spandau.
Seg¨²n el comunicado emitido en la tarde del lunes por el gobierno militar brit¨¢nico, en cuyo sector se halla la prisi¨®n fortaleza, "Rudolf Hess, uno de los destacados criminales de guerra nacionalsocialistas, condenado a cadena perpetua por el tribunal militar de Nuremberg, ha muerto en la c¨¢rcel de Spandau".
Esta informaci¨®n contradec¨ªa las declaraciones de testigos oculares que hab¨ªan visto salir una ambulancia de Sparidau, esta vez sin escolta y sin preparativos, habituales en ¨²ltimos traslados de Hess al hospital brit¨¢nico. Fless ser¨¢ enterrado en el pante¨®n familiar en Wunsiedel, cerca de la frontera con Checoslovaquia.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.