Amplia correcci¨®n de las cotizaciones
Desde los primeros compases de la sesi¨®n de ayer, hasta los corros finales, el papel vendedor tom¨® la iniciativa, dejando en la m¨¢s completa de las soledades a los escasos compradores dispuestos a tomar las partidas que se ofrec¨ªan por doquier. ¨ªndices y cotizaciones han dibujado una figura claramente bajista, que se ha interpretado como los primeros balbuceos de una correcci¨®n m¨¢s profunda y que se extender¨ªa a lo largo de las pr¨®ximas semanas.Ninguno de los grupos de contrataci¨®n en los que se subdivide el mercado ha podido salvarse de una quema generalizada y que ha afectado de manera singularmente profunda a sider¨²rgicas, constructoras y comunicaciones. S¨®lo los bancos y algunos valores industriales aislados han sido capaces de dar muestras de algo parecido a la resistencia, aunque sin motivos de alegr¨ªa y con prudencia.
El par de el¨¦ctricas que sal¨ªan de la ma?ana con precios inferiores a su nominal o a punto de perder la par, los fuertes quebrantos de los autom¨®viles y los hierros y el mal ambiente observado en casi todas las qu¨ªmicas o en Telef¨®nica compon¨ªan el negro panorama de una sesi¨®n mal dispuesta de cabo a rabo.
Las instituciones que se encontraban en liquidez, a la busca y captura de oportunidades, han visto con buenos ojos el inicio de una fase correctora despu¨¦s de las escandalosas subidas de los meses anteriores, mientras los inversionistas que hab¨ªan esperado para ganar ese ¨²ltimo duro del tir¨®n alcista han quedado bastante desolados.
Los analistas del mercado apuntan con notable convicci¨®n la posibilidad de que los corros se encaminen durante el oto?o por los derroteros marcados por la debilidad operativa como consecuencia de la necesaria purga de niveles, as¨ª como por la llegada de papel de provincias y de realizaciones efectuadas por la inversi¨®n extranjera.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
?Tienes una suscripci¨®n de empresa? Accede aqu¨ª para contratar m¨¢s cuentas.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.