Los obispos brasile?os piden en el s¨ªnodo que se permita la absoluci¨®n colectiva sin previa confesi¨®n
Los obispos brasile?os han comenzado a lanzar sus primeros dardos en el S¨ªnodo de los Obispos que acaba de inaugurarse en Roma, pidiendo que Roma abra la mano en el delicado problema de la confesi¨®n general, es decir, que se acepte la posibilidad de recibir la absoluci¨®n de los pecados de forma colectiva, sin previa confesi¨®n individual. Los padres sinodales estudiar¨¢n durante todo este mes el tema El seglar cristiano en la Iglesia y en el mundo. La primera sesi¨®n la abri¨® el papa Juan Pablo II.
La reacci¨®n de la curia a esta propuesta no se hizo esperar y r¨¢pidamente se levant¨® un cardenal de la curia romana para recordar que los casos en los que se puede permitir dicha confesi¨®n general est¨¢n ya previstos en el C¨®digo de Derecho Can¨®nico.En relaci¨®n con el tema de la confesi¨®n dos obispos, cuyos nombres no han sido revelados, han denunciado ante el s¨ªnodo el hecho de que aumenta el n¨²mero de sacerdotes que rechazan la confesi¨®n alegando que los pecados se perdonan directamente con la oraci¨®n.
Como en s¨ªnodos anteriores, las primeras intervenciones dan a entender que lo m¨¢s interesante podr¨ªa ser el c¨²mulo de problemas pr¨¢cticos que suelen poner sobre el tapete los obispos y cardenales llegados de todo el mundo, prescindiendo del resultado final, que suele acabar siempre en compromiso.
Esta vez, trat¨¢ndose del tema de los seglares, los representantes del llamado pueblo de Dios son numerosos: 60 entre hombres y mujeres. Podr¨¢n incluso intervenir en las asambleas generales con sus ponencias. Pero no podr¨¢n decidir nada porque no tienen derecho al voto.
Podr¨ªa parecer una paradoja el que en un s¨ªnodo en el que se trata exclusivamente del problema del laicado cat¨®lico dichos seglares presentes, invitados por el Papa, no puedan participar con su voto a las decisiones finales. Y, sin embargo, las cosas han cambiado mucho gracias al Concilio.
Dejarse conducir
Baste recordar que P¨ªo X, en su enc¨ªclica Vehementer Nos, escrib¨ªa: "La iglesia es una sociedad que comprende dos categor¨ªas de personas: los pastores y el reba?o. Y por lo que se refiere a las ovejas del reba?o, su ¨²nico papel es el de dejarse conducir con dulzura por sus pastores".Hace apenas un siglo que el cardenal Gasquet describ¨ªa as¨ª la funci¨®n del seglar cuando va a la iglesia: "Estar de rodillas delante del altar, sentado delante del p¨²lpito y con la mano en la cartera para dar la ofrenda en la puerta al salir". Para muchos, el que estas ovejas mudas de ayer puedan hoy hablar ante los obispos y cardenales de todo el mundo con libertad es ya mucho. Aunque hay quien piensa que se est¨¢ a¨²n en los albores de la verdadera batalla que 'los seglares deber¨ªan dar dentro de la iglesia.
El concilio sancion¨® que la iglesia no es s¨®lo la jerarqu¨ªa sino todo el pueblo de Dios. A los seglares se les pide que sean los que anuncien el evangelio en la calle, en la familia y en el trabajo. Pero al mismo tiempo se les sigue prohibiendo anunciar dicho evangelio en las iglesias, mientras que a las mujeres se las sigue discriminando impidi¨¦ndolas participar con pleno derecho en el sacerdocio.
Por el momento, es dif¨ªcil prever lo que este s¨ªnodo sobre los seglares pueda reservar, pero lo que s¨ª es cierto es que nunca como esta vez las conferencias episcopales han respondido con sus trabajos previos con menos ganas. M¨¢s de 50 conferencias ni siquiera respondieron a los cuestionarios enviados por la secretar¨ªa del s¨ªnodo. Y de la misma curia romana de 24 cardenales interpelados sobre el tema respondieron s¨®lo 14.
Por otra parte, los mismos seglares cat¨®licos en los diversos pa¨ªses no parec¨ªan en la v¨ªspera del s¨ªnodo demasiado interesados en el tema. En Francia, por ejemplo, seg¨²n un sondeo hecho por el diario cat¨®lico La Croix, s¨®lo un franc¨¦s sobre 10 sab¨ªa que el s¨ªnodo iba a tratar sobre los seglares y lo sab¨ªa s¨®lo uno de cada tres cat¨®licos practicantes.
Seg¨²n el especialista mundial en problemas de ate¨ªsmo, el dominico F¨¦lix Morlion, de los 840 millones de cristianos bautizados, s¨®lo nueve millones invocan a Dios una vez a la semana, y calcula que los cat¨®licos son en la actualidad y en la pr¨¢ctica ateos en un 99% de los casos.
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