Minor¨ªa Catalana intenta un acercamiento al PSOE

Jordi Pujol, presidente de la Generalitat, ha decidido replantear la pol¨ªtica del grupo de Minor¨ªa Catalana en el Congreso de Diputados, con el objetivo de desmarcarse de los otros dos partidos de centro derecha -Alianza Popular y Centro Democr¨¢tico y Social (CDS) que, por motivos diferentes, efect¨²an una oposici¨®n sistem¨¢tica al PSOE. Pujol desea matizar su actitud cr¨ªtica e iniciar una pol¨ªtica de convivencia constructiva con el Ejecutivo de Felipe Gonz¨¢lez, y abrir un di¨¢logo con los dirigentes del PSOE sobre los proyectos legislativos que deben entrar en la c¨¢mara este a?o, seg¨²n fuentes de Converg¨¨ncia.Miquel Roca, portavoz de Minor¨ªa Catalana, tiene el mandato de intentar aprovechar la necesidad socialista de conseguir aliados parlamentarios para evitar que sus leyes se aprueben aplicando mec¨¢nicamente la mayor¨ªa absoluta del PSOE frente a todos los dem¨¢s, para introducir criterios y matizaciones que respondan a la estrategia nacionalista. A la vez, con esta t¨¢ctica Pujol aspira a recuperar para Roca y Minor¨ªa Catalana el prestigio que ten¨ªan hasta la fallida operaci¨®n reformista. Seg¨²n el an¨¢lisis del presidente de la Generalitat, a pesar de que CiU ha incrementado su n¨²mero de diputados, en esta legislatura se ha diluido notablemente su buena imagen de partido dispuesto a ayudar a la gobernabilidad del Estado, una de las cuestiones de imagen de las que Pujol estaba m¨¢s orgulloso.

Desconfianza

No es ajena a la nueva estrategia la desconfianza que merece a los nacionalistas catalanes Antonio Hern¨¢ndez Mancha, presidente de Alianza Popular, a quien se considera poco s¨®lido para vertebrar una alternativa cre¨ªble de gobierno. En los altos cuadros de Converg¨¨ncia se censura al nuevo equipo aliancista, y sus actitudes se consideran fr¨ªvolas. Como ejemplo de ello, citan la improvisaci¨®n de prometer mociones de censura por la p¨¦rdida de la presidencia de la Xunta, o el anuncio de que en septiembre Hern¨¢ndez Mancha se entrevistar¨ªa con Pujol, a pesar de no haber solicitado siquiera el contacto.

Entre las consignas de Minor¨ªa Catalana figura ahora la de huir de las descalificaciones globales innecesarias del Gobierno socialista. Como primeros ejemplos de esta estrategia, los nacionalistas catalanes han empezado a apoyar en las ¨²ltimas semanas varias iniciativas gubernamentales -modificaci¨®n del C¨®digo Penal, temas de terrorismo, aplicaci¨®n y desarrollo de la LODE y LRU y cuestiones relacionadas con el Mercado Com¨²n- en las Cortes sin otras contrapartidas que conocer antes los proyectos y poder introducir peque?as modificaciones. Adem¨¢s, anuncian una actitud "lo m¨¢s constructiva posible" en el pr¨®ximo debate sobre los Presupuestos Generales del Estado, con lo que dejan abierta la posibilidad de que su voto no sea negativo, contra lo que ocurri¨® en a?os anteriores.

Seg¨²n varios dirigentes de Converg¨¦ncia, una vez superado el a?o de discreci¨®n impuesto por el fracaso de la operaci¨®n reformista y el desenlace de la querella de Banca Catalana, Pujol quiere dar la imagen de que su grupo es capaz de llegar a acuerdos progresistas con el PSOE, a diferencia del Centro Democr¨¢tico y Social (CDS).

Esta pol¨ªtica tiene, para Converg¨¨ncia, el doble atractivo de tender un puente sobre los socialistas catalanes y reforzar su propio entendimiento directo con el Gobierno en Madrid, y el de obstruir el crecimiento del CDS en Catalu?a con la sensaci¨®n de que es CiU la que tiene capacidad de hacer valer su peso para negociar temas. Por el contrario, los nacionalistas no van a modificar dentro de la comunidad aut¨®noma su l¨ªnea de abierto hostigamiento y marginaci¨®n de los socialistas catalanes.

Un dato concreto que aportan los dirigentes de Converg¨¨ncia sobre la nueva situaci¨®n es que "Miquel Roca vuelve a ser recibido muy bien en los ministerios, de modo que se ha roto la frialdad de todo el a?o pasado, y lo mismo sucede con los dem¨¢s diputados catalanes en los despachos gubernamentales".

Como complemento de esta estrategia espa?ola, los consellers del Gobierno de la Generalitat iniciaron hace dos semanas un despliegue de visitas y contactos a los presidentes y consejeros de las diferentes comunidades aut¨®nomas.

En estos desplazamientos, que no tienen ning¨²n objetivo concreto a corto plazo, los miembros del Ejecutivo catal¨¢n ponen a disposici¨®n de sus interlocutores sus experiencias de ocho a?os de autogobierno y les ofrecen asesoramiento sobre las iniciativas desarrolladas en Catalu?a (financiaci¨®n a trav¨¦s del juego, televisi¨®n, pol¨ªtica tur¨ªstica, regulaci¨®n comercial, etc).

Esta ronda de contactos sigue, por ejemplo, esta misma semana con los encuentros que mantendr¨¢ el conseller de Agricultura, Josep Mir¨® i Ard¨¨vol, con los presidentes socialistas de Murcia y Extremadura.

Seg¨²n varios consellers, estos encuentros est¨¢n reafirmando a Jordi Pujol su tesis de que existe cierto desencanto generalizado en todas las autonom¨ªas por la pol¨ªtica poco descentralizadora que efect¨²a el Gobierno de Felipe Gonz¨¢lez. "Nadie nos discute a los catalanes el hecho de que hemos de ser nosotros los que tiremos del carro de la autonom¨ªa", seg¨²n un dirigente de CiU.