Tres Cantos, sin gas

Hace unas semanas enviaron unos atractivos folletos indicando a todos los vecinos de Tres Cantos que abri¨¦semos las puertas al gas natural. Nos indicaban que no hab¨ªa ning¨²n coste, que era una energ¨ªa limpia (de momento pretende limpiar los bolsillos, claro), es de mayor poder cal¨®rico, etc¨¦tera.Lo que no se dice es que llevamos una semana sin gas; esto es, comiendo bocadillos y lav¨¢ndonos con un cazo... Los ni?os, en las guarder¨ªas y colegios, hacen lo mismo, y las impresiones que se recogen es que tardaremos una o dos semanas en tener gas. Hasta la fecha, el ¨²nico gas natural que existe es el que expiden aquellos que adem¨¢s se olvidaron del desodorante...

Pero no termina aqu¨ª la cuesti¨®n. Primero se dijo: "Sin coste alguno". La realidad es otra. Hace unas semanas vinieron tres empleados -eso s¨ª, debidamente identificados- para revisar las instalaciones. Lo primero que hicieron fue decir que cada cocina necesitaba aireaci¨®n. Una cocina, la nuestra, tiene una puerta exterior y una ventana, dos salidas para el aire y una campana para absorci¨®n de humos. Nos piden un hueco m¨¢s. ?Tan natural no ser¨¢ el gas ¨¦se, digo yo! Antes, siendo m¨¢s t¨®xico, nunca pidieron m¨¢s aireaci¨®n.

Luego revisaron la instalaci¨®n y..., ?casualidad!, ?todos los bloques de pisos tienen la misma aver¨ªa o, al menos, el mismo precio: 44.000 pesetas que hay que pagar! Pero, adem¨¢s, no dar¨¢n gas natural si no hay una persona responsable de la deuda que debe garantizar que el sablazo ser¨¢ pagado. La factura o presupuesto en cuesti¨®n ni tiene firma, ni se ajusta a la reparaci¨®n, ni se garantiza nada; pero, eso s¨ª, o pagas o no hay gas. Si la instalaci¨®n era defectuosa, quiere decir que hemos vivido hasta la fecha sobre un volc¨¢n, pues jam¨¢s nos hicieron una inspecci¨®n.

Pero lo m¨¢s doloroso es que, en pleno oto?o (no pudieron hacerlo en verano), 14.000 vecinos estamos sin agua caliente, sin poder cocinar, sin saber cu¨¢ndo se resolver¨¢ el asunto y sin poder reclamar, porque de nada sirve. Para m¨¢s inri, tenemos que abrir las puertas al gas natural; esto es, a Gas Madrid, cuando lo ¨²nico leg¨ªtimo es darles con las puertas en las narices; pero, claro, ante un monopolio, pagar y callar. Porque los pol¨ªticos bastante hablaron ya en las pasadas elecciones municipales para pedirles explicaciones ahora...- Rub¨¦n Gil.