Carles Vall¨¦s, uno de los supevivientes en el Lhotse Shar: "Cubrimos dignamente a los compa?eros muertos"

Caries Vall¨¦s, uno de los tres catalanes que alcanz¨® la cima del Everest en 1985, explic¨® ayer a Catalunya R¨¤dio, desde un hotel de Katmand¨², las circunstancias de la muerte de cuatro de sus compa?eros de la expedici¨®n Massana al Lhotse Shar. "Llegamos hasta donde esestaban y les cubrimos dignamente, pero el rescate era imposible" dijo Vall¨¦s. Entre los fallecidos estaba Toni Sors, uno de los catalanes que pis¨® la cima del Everest en 1985.

Carles Vall¨¦s explic¨® que la segunda cordada de ataque, de la que formaban parte ¨¦l y los restantes supervivientes -Merc Maci¨¢, Toni Ricart y Manu Badiola- perdi¨® contacto con la primera, encabezada por Toni Sors, poco despu¨¦s de que abandonasen el campo 4 el 27 de septiembre. "Al principio no nos preocupamos", dijo Vall¨¦s, porque hab¨ªamos tenido problemas con nuestras radios los d¨ªas anteriores".Ellos ten¨ªan que instalar el campo 5", continu¨® Vall¨¦s", para iniciar despu¨¦s el ataque final a la cima. Esa zona no era la m¨¢s peligrosa, pero las pendientes estaban muy cargadas de nieve".

"El d¨ªa 28", prosigui¨® Vall¨¦s, "Ricart baj¨® al campo base a realizar una inspecci¨®n ocular de la monta?a. El 29, nuestra cordada inspeccion¨® visualmente, con la ayuda de prism¨¢ticos, la zona comprendida entre los 7.400 y los 7.800 metros, y no vimos ni rastro de nuestros compa?eros. No hab¨ªan llegado tan lejos".

Ca¨ªda vertical

"Un alud de nieve les sorprendi¨® cuando estaban a 7.450 metros de altura", dijo Vall¨¦s, quien fren¨® su explicaci¨®n para a?adir: "Es muy duro tener que explicar esto". Vall¨¦s afirm¨® a continuaci¨®n que el rescate era imposible: "Estuvimos muy cerca de ellos, los tocamos. Estaban en una zona de inminente peligro, a la que t¨² s¨®lo te acercas cuando un compa?ero ha tenido un accidente y ha ca¨ªdo ah¨ª. Los tapamos dignamente. Pero inmediatamente se reanudaron los aludes"."Cayeron desde 7.450 hasta 5.200 metros", dijo Vall¨¦s. "Es decir, 2.200 metros de ca¨ªda vertical. Los restos estaban en un cono a donde iban a parar los aludes de nieve. Nos ayud¨® un grupo anglo-americano, y realizamos una labor humana a la que est¨¢bamos obligados. Pero los cuerpos quedaron sepultados bajo miles de toneladas de nieve, y es imposible sacarlos de all¨ª". Para Vall¨¦s, la muerte de sus compa?eros en la monta?a fue "muy digna, pero sigue siendo muy duro".

Vall¨¦s, junto a Maci¨¢ y Badiola, tienen previsto llegar a Barcelona el pr¨®ximo s¨¢bado o domingo, mientras que Ricart permanecer¨¢ en Katmand¨² realizando gestiones.