Espa?a y Francia eluden en la 'cumbre' bilateral sus diferencias sobre la pol¨ªtica comunitaria
ENVIADO ESPECIAL Espa?a y Francia hicieron ayer hincapi¨¦ en los temas bilaterales en los que es posible fomentar su mutua cooperaci¨®n, y trataron de olvidar las cuestiones que les separan, especialmente en lo que se refiere a sus diferencias en el seno de la Comunidad Europea. Estas diferencias, tanto agr¨ªcolas -que no se trataron en la reuni¨®n ministerial que ayer se clausur¨® en Annecy (Alta Saboya)- como presupuestarlas, seguir¨¢n, presumiblemente, enfrentando a los dos pa¨ªses en el encuentro restrigido de ministros de Asuntos Exteriores que hoy tiene lugar en Luxemburgo.
A esta reuni¨®n asistir¨¢n Francisco Fern¨¢ndez Ord¨®?ez y su colega franc¨¦s, Jean Bernard Raimond, las dos estrellas del encuentro de Annecy. Tampoco parece probable que Espa?a se alinee junto a Francia cuando, a principios de diciembre, tenga lugar la cumbre de jefes de Estado y Gobierno de la CE. En Copenhague, con el presupuesto comunitario como principal punto en la agenda.La conclusi¨®n concreta m¨¢s importante surgida de Annecy, s¨¦ptimo encuentro bilateral hispano-franc¨¦s desde 1983, fue la creaci¨®n de una comisi¨®n espec¨ªfica, compuesta por funcionarios de los ministerios de Exteriores y Defensa, para estudiar los problemas de la seguridad en el Mediterr¨¢neo. El hecho de que esta comisi¨®n vaya a estar presidida por funcionarios a nivel de subdirectores generales da idea del bajo perfil que tendr¨¢ este organismo, puramente consultivo.
Al margen de los escasos avances concretos, la mayor parte de ellos en cuestiones educativas y culturales, cuestiones que presentan nulos m¨¢rgenes de conflictividad, ambas partes subrayaron el buen clima de la reuni¨®n de Annecy, donde, seg¨²n el ministro Raimond, no se pudieron resolver cuestiones delicadas por la sencilla raz¨®n de que ¨¦stas no existen. Fern¨¢ndez Ord¨®?ez destac¨®, en su turno de declaraciones cordiales, que las relaciones hispano-francesas "han pasado de la buena vecindad a la buena amistad".
Este buen clima, creado un tanto al margen de litigios espec¨ªficos menores, presidir¨¢ la visita que Felipe Gonz¨¢lez realizar¨¢ a
Par¨ªs dentro de tres semanas para entrevistarse con el presidente, Fran?ois Mitterrand, y con el primer ministro, Jacques Chirac. Pero entonces ser¨¢n los temas europeos, m¨¢s espinosos, los que deber¨¢n ser abordados.La reuni¨®n de Annecy, que dur¨® todo el fin de semana, pero en la que apenas se registr¨® un total de tres horas de efectivas conversaciones de trabajo, congreg¨® a los ministros espa?oles de Asuntos Exteriores, Defensa y Cultura y a los secretarios de Estado de Asuntos Europeos, Hacienda y Educaci¨®n, con sus colegas franceses. Los temas tratados incluyeron desde la conmemoraci¨®n en Espa?a del bicentenario de la Revoluci¨®n Francesa hasta la cooperaci¨®n en materia de astronom¨ªa y sat¨¦lites; Espa?a no logr¨® siquiera arrancar a los franceses un compromiso formal de compra de aviones CN 235 de CASA y tampoco se comprometi¨® en firme a adquirir armas francesas, como veh¨ªculos lanzamisiles Roland o helic¨®pteros Superpuma. As¨ª, al margen de la ya citada comisi¨®n sobre seguridad en el Mediterr¨¢neo y un convenio de coproducci¨®n cinematogr¨¢fica, nada tangible surgi¨® del encuentro.
Adem¨¢s, hay que tener en cuenta que temas delicados, como las querellas agr¨ªcolas y pesqueras y la balanza comercial bilateral, tampoco estuvieron presentes, sino de pasada, en el castillo de la hist¨®rica capital de la Alta Saboya. "Ha sido una reuni¨®n m¨¢s de reflexi¨®n que de conclusiones", defini¨® ayer este acto un diplom¨¢tico espa?ol que asisti¨® a Annecy.
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