El brote de c¨®lera de Barcelona se origin¨® en las hortalizas contaminadas de un huerto

Las investigaciones epidemiol¨®gicas emprendidas para identificar el foco del que parti¨® el episodio de c¨®lera registrado en Barcelona a partir del pasado 28 de septiembre, que afect¨® a cinco personas, han establecido el origen del brote en un huerto de Sant Boi en el que han trabajado varios emigrantes marroqu¨ªes, que pudieron ser los portadores. Sin embargo, los coprocultivos practicados en las heces de dos de ellos y en las verduras actualmente existentes han sido negativos, por lo que, en caso de que se confirmase fehacientemente que ¨¦se fue el ¨²nico foco, habr¨ªa dejado de ser activo.

El director general de Salud P¨²blica del Departamento de Sanidad, Pere Mercader, manifest¨® ayer que existen certezas razonables de que el episodio se encuentra totalmente controlado y es presumible que no se produzcan nuevos casos. A los cinco registrados en Barcelona hay que a?adir otro m¨¢s en L¨¦rida, aunque todav¨ªa no se ha podido establecer si existe relaci¨®n entre ellos. Se trata de una mujer de 53 a?os que se encuentra internada en el hospital Arnau de Vilanova de aquella ciudad. Su estado ha evolucionado satisfactoriamente y se encuentra en condiciones de abandonar el hospital, seg¨²n fuentes m¨¦dicas.La identificaci¨®n del origen del brote ha sido muy laboriosa, dado el escaso n¨²mero de afectados y la consiguiente dificultad para establecer circunstancias comunes que permitieran precisar la v¨ªa de contagio. La primera medida adoptada por los responsables del Instituto Municipal de la Salud de Barcelona fue analizar el agua potable y las hortalizas disponibles en el mercado, pero estos an¨¢lisis dieron resultados negativos. Tras el an¨¢lisis de los alimentos ingeridos se elaboraron varias hip¨®tesis que condujeron a practicar pruebas en mejillones y boquerones.

Estos an¨¢lisis fueron tambi¨¦n negativos, por lo que el ¨²nico elemento com¨²n a todos los pacientes eran las verduras. Se inici¨® entonces una investigaci¨®n sobre las tiendas de las que se suministraban las familias afectadas y de ella surgi¨® una pista que condujo hasta un puesto de verduras del mercado de la Boquer¨ªa. Siguiendo este hilo se pudo identificar el mayorista que hab¨ªa distribuido la verdura contaminada en Mercabarna (mercado central) y, a trav¨¦s de ¨¦l, se lleg¨® a la finca de Sant Boi de la que proven¨ªa.

Dado que la finca se encontraba fuera de Barcelona, la Direcci¨®n General de Salud P¨²blica de la Generalitat tom¨® el relevo en la investigaci¨®n y procedi¨® al an¨¢lisis de las verduras y aguas residuales de la huerta en cuesti¨®n. Los resultados, conocidos ayer, fueron negativos respecto a la cepa concreta del c¨®lera que padecieron los enfermos de Barcelona, aunque en las aguas residuales se encontraron otros vibrios, pero no pat¨®genos, por lo que no son susceptibles de provocar la enfermedad.

Tambi¨¦n se han analizado las heces de dos de los trabajadores que hab¨ªan sido contratados en la finca durante las ¨²ltimas semanas. El resultado ha sido igualmente negativo, pero no se descarta que el foco pudiera ser alguno de los otros trabajadores. El hecho de que tanto estos an¨¢lisis como los practicados en las verduras den ahora negativo no desmiente la hip¨®tesis epidemiol¨®gica de que ¨¦se sea el punto de origen, ya que, dado el tiempo transcurrido, es razonable que no existan restos, y tampoco se pueden analizar las verduras que presumiblemente expandieron el brote.

S¨ªntomas alarmantes

El agente causante del c¨®lera precisa de unas determinadas condiciones para expandirse, entre ellas determinadas circunstancias meteorol¨®gicas y de temperatura, y las variaciones de los ¨²ltimos d¨ªas dificultar¨ªan la pervivencia del brote. Seg¨²n Pere Mercader, la mayor parte de los casos registrados desde 1970 se han producido en la misma ¨¦poca del a?o. El director general de Salud P¨²blica precis¨® que en este caso la enfermedad ha presentado s¨ªntomas muy alarmantes, pero de escasa gravedad, por lo que todos los enfermos han podido superarla con facilidad.