Ning¨²n miembro de Els Joglars asiste al juicio que se les sigue en Burgos

Ning¨²n miembro del grupo Els Joglars asisti¨® ayer en la Audiencia de Burgos al juicio iniciado contra Albert Boadella y otros nueve miembros del colectivo por unos delitos de blasfemia y escarnio a la religi¨®n cat¨®lica presuntamente contenidos en la obra Tekdewn, que representaron en la ciudad castellana el 4 de agosto de 1984. La querella fue presentada por el ahogado burgal¨¦s Juan Riu, miembro de la Adoraci¨®n Nocturna, que se person¨® en la representaci¨®n con un notario, que levant¨® acta de los pasajes que, en su opini¨®n, supon¨ªan un ultraje a la eucarist¨ªa.El juicio se ha demorado m¨¢s de tres a?os en parte por el hecho de que los mismos delitos fueron juzgados con anteriofidad en Jerez y Valencia, procesos que fueron sobrese¨ªdos y que en estos momentos, a instancias de la acusaci¨®n particular de Valencia, se encuentran pendientes del Tribunal Supreno.

En el proceso seguido en Burgos, tanto el ministerio fiscal como la defensa solicitan la libre absoluci¨®n. La acusaci¨®n particular pide seis meses para cada miembro del grupo y 70.000 pesetas, por dos delitos de blasfemia y uno de escarnio.

El juicio ha suscitado una considerable expectaci¨®n en Burgos, donde la sala se encontraba repleta de p¨²blico. Una parte de los asistentes mostr¨® su contrariedad por el referido hecho, desconocido hasta ¨²ltima hora, de que ninguno de los miembros de Els Joglars se personase en el juicio. La incomparecencia fue explicada por el representante del grupo, Josafat Coromina: "No queremos dar relevancia a un juicio en el que lo que se juzga ya ha sido sobrese¨ªdo por otras audiencias y en estos momentos se encuentra en el Tribunal Supremo".

El juicio, que se inici¨® a las cuatro y media de la tarde, comenz¨® con la lectura de las declaraciones de los actores implicados, quienes reconocen que en ning¨²n momento el contenido de la obra, que se represent¨® en muchas ciudades espa?olas, trata de hacer escarnio de la religi¨®n cat¨®lica.

Posteriormente, prestaron declaraci¨®n los cuatro testigos de la acusaci¨®n particular, que representa el propio Juan Riu. Los testigos, de edades comprendidas entre los 82 y 62 a?os, reconocieron que son amigos de Riu y que acudieron a la representaci¨®n a petici¨®n de ¨¦ste para ser poster¨ªormente testigos en caso de que se iniciase una querella por la obra teatral. Todos aseguraron que ten¨ªan noticias por la prensa de que el contenido de la obra pod¨ªa herir sus creencias religiosas, pero precisaron que no obstante hab¨ªan ido para tener una informaci¨®n de primera mano sobre su contenido y as¨ª poderla juzgar.

Pregunta del fiscal

El fiscal, Jos¨¦ Mar¨ªa ?lvarez Anll¨®, de unos 35 a?os, les pregunt¨® que si tambi¨¦n acud¨ªan a tiendas de art¨ªculos para sexuales o a pel¨ªculas X para as¨ª poder tambi¨¦n juzgar si efectivamente van en contra de sus principios. El juez desestim¨® esta pregunta.A diferencia de los testigos de la acusaci¨®n, que se centr¨® en el presunto escarnio y mofa de la eucarist¨ªa, y su efecto negativo en los testigos, los llamados por la abogada defensora, Soledad Renedo, manifestaron que la obra era una farsa y que en ning¨²n momento se hab¨ªan sentido heridos.

Uno de los testigos, el entonces delegado territorial de Cultura, Jos¨¦ Luis Ollero, que program¨® la reprsentaci¨®n, record¨® que Els Joglars siempre tuvieron gran ¨¦xito en sus representaciones en Burgos.