Problemas econ¨®micos

ENVIADO ESPECIALEl temido desastre ecol¨®gico por el encallamiento del buque Cason, que por ahora no se ha producido, lleva camino de convertirse en un desastre econ¨®mico para los habitantes de la zona de Finisterre, que dependen del mar para su subsistencia. La reciente orden de acotar una zona entre Finisterre y Punta Lires, en la que no se podr¨¢ pescar, para permitir las tareas de rescate de la carga del buque, ha provocado la protesta de las cofrad¨ªas de marineros de Finisterre. Por otra parte, ayer las autoridades informaron tambi¨¦n que la alarma de la nube t¨®xica vino originada por la posibilidad de que hubieran ardido tres bidones de disocianato de difenil-metano.

Las obras de rescate de la carga del buque siguen paralizadas a la espera de que llegue la gr¨²a encargada de retirar los contenedores de la cubierta del buque, y tambi¨¦n a que pase el mal tiempo en la costa.

Contenido de los bidones

El s¨¢bado, a ¨²ltima hora de la noche, la Direcci¨®n General de la Marina Mercante, la Direcci¨®n General de Salud Alimentaria del Ministerio de Sanidad y Consumo, el Instituto Espa?ol de Oceanograf¨ªa y diversos departamentos de la Xunta de Galicia hicieron p¨²blico un comunicado en el que por fin se informa de los productos destruidos o ca¨ªdos al mar desde la cubierta del Cason: tres bidones de disocianato de difenil-metano, que pueden haberse destruido por el incendio o ca¨ªdo al mar. Este producto es nocivo, pero no t¨®xico, aunque en caso de arder produce vapores muy t¨®xicos. La existencia de estos tres bidones en el buque fue lo que determin¨® que en el momento de producirse las llamas se advirtiera que podr¨ªa haber contaminaci¨®n ambiental en un radio de 200 a 400 metros alrededor del buque.Se confirm¨® que los bidones de ¨¢cido ortof¨®sf¨®rico y ¨¢cido sulf¨²rico fueron arrancados de la cubierta por el temporal y cayeron al mar. Otros 22 bidones de formaldeh¨ªdo en soluci¨®n han ca¨ªdo al mar o han sido destruidos por combusti¨®n, por su proximidad a uno de los contenedores de sodio met¨¢lico. Otros 164 bidones de ortocresol han desaparecido por ca¨ªda al agua o han resultado destruidos por combusti¨®n.

La nota firmada conjuntamente por los organismos antes mencionados afirma "que los productos enumerados no producen efectos nocivos ni t¨®xicos sobre la salud de las personas, siempre que no se entre en contacto con ellos".