El embrollo el¨¦ctrico
EL 6,02% de aumento de las tarifas el¨¦ctricas, porcentaje propuesto por el Ministerio de Industria y Energ¨ªa en el expediente enviado ayer a la consideraci¨®n de la Junta Superior de Precios, seguramente levantar¨¢ ampollas cuando la propuesta llegue a manos del Consejo de Ministros, una vez que la Comisi¨®n Delegada del Gobierno para Asuntos Econ¨®micos la analice el pr¨®ximo d¨ªa 14. Ese 6,02% constituye un porcentaje desorbitado si se tiene en cuenta que el objetivo de inflaci¨®n para este a?o es el 3%, y que ser¨¢ en tomo a dicho d¨ªgito donde se situar¨¢n los incrementos salariales de la mayor¨ªa de los ciudadanos espa?oles. Ello justificar¨ªa de entrada el posible rechazo de otros departamentos ministeriales que han tenido menos suerte al ver rebajadas sus demandas de aumentos para sus respectivas competencias.Pero la propuesta de Industria para las el¨¦ctricas es susceptible de cr¨ªticas desde otros aspectos. Aumentar al consumidor en un 6,02% la factura el¨¦ctrica supone que, una vez m¨¢s, se recurre al manido expediente de cargar sobre los bolsillos de la ciudadan¨ªa los graves problemas financieros del sector el¨¦ctrico. Una soluci¨®n demasiado simple para un problema tan complejo y tan prolijamente debatido, cuya responsabilidad puede distribuirse sobre diversos hombros: los gestores de las empresas, que afrontaron con un optimismo digno de mejor causa el endeudamiento nuclear; la banca, que facilit¨® los cr¨¦ditos para ese endeudamiento y que se ha beneficiado en su doble calidad de accionista y financiador; la Administraci¨®n, que ha ido dibujando a lo largo del tiempo una extra?a situaci¨®n del sector el¨¦ctrico, que es de propiedad privada pero con absoluta tutela p¨²blica, inmerso en un mar de intereses creados. Y entre los responsables de la situaci¨®n no figuran ni los consumidores, que siempre han pagado las tarifas que se les han impuesto, ni -lo que es lo mismo- los contribuyentes, que no deber¨ªan ser de nuevo los paganos v¨ªctimas.
Tampoco parece razonable aumentar un 6%. las tarifas el¨¦ctricas cuando la industria espa?ola necesita aquilatar al m¨¢ximo sus costes para competir en Europa. Sectores como la siderurgia o la qu¨ªmica, que figuran entre los grandes consumidores de electricidad, se quejan desde hace tiempo del exorbitante precio de la electricidad espa?ola. Y no les falta raz¨®n, si se tiene en cuenta que la electricidad se ha incrementado en Francia un 5,7% desde 1983 (y este ¨²ltimo a?o ah¨ª se ha abaratado) mientras en Espa?a se ha encarecido en el n¨²sino per¨ªodo un 40,31%; el kilovatio cuesta en Francia 5,3 pesetas y en Espa?a 10,3 pesetas.
Nadie ignora que los problemas del sector el¨¦ctrico son reales y muy graves. El coste de la producci¨®n de energ¨ªa en el sector el¨¦ctrico espa?ol difiere sensiblemente de una a otra empresa, seg¨²n la composici¨®n de sus centrales productivas (la energ¨ªa de origen nuclear est¨¢ siendo, de momento, m¨¢s cara). Tambi¨¦n resulta cara nuestra producci¨®n el¨¦ctrica a partir del carb¨®n, e interviene ah¨ª otro complejo factor: la miner¨ªa espa?ola del carb¨®n subsiste gracias a las compras de las el¨¦ctricas, lo que supone que este sector minero dependa asimismo de las tarifas el¨¦ctricas. La homogeneizaci¨®n de costes intentada en el proceso de intercambio de activos no ha logrado superar del todo esas diferencias.
Las mejores soluciones no suelen ser las m¨¢s sencillas de aplicar. Se impone, por tanto, la b¨²squeda de unas f¨®rmulas m¨¢s imaginativas que el simple traspaso lineal de la factura al consumidor para resolver los problemas financieros del sector el¨¦ctrico. La mejor soluci¨®n afectar¨ªa sin duda a la banca -que conoce bien los vericuetos del sector tras la terapia de choque aplicada a FECSA-, a la Administraci¨®n y a las propias empresas. Pero no vale invocar la protecci¨®n de la solvencia espa?ola ante la banca extranjera -gran financiadora del sector el¨¦ctrico- parajustificar un dr¨¢stico aumento de tarifas con el que salir del paso. Todo antes que penalizar a quienes no han tenido arte ni parte en el embrollo el¨¦ctrico espa?ol.
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