El fiscal eleva a 14 a?os la petici¨®n de pena por la muerte de Agust¨ªn Rueda

El fiscal elev¨® ayer de 12 a?os a 14 a?os, 8 meses y un d¨ªa la petici¨®n de pena para el director, subdirector y cada uno de los funcionarios de la c¨¢rcel de Carabanchel procesados por la muerte del recluso Agust¨ªn Rueda el 14 de marzo de 1978. El fiscal no modific¨® la petici¨®n de cinco a?os de prisi¨®n que ya solicitar¨¢ para los m¨¦dicos del centro penitenciario que asistieron a Rueda, Jos¨¦ Luis Casas y Jos¨¦ Mar¨ªa Barig¨®n.El fiscal, que calific¨® los hechos como homicidio, modific¨®, tras lo escuchado en el juicio, una frase de su relato de los hechos. Antes dec¨ªa que los funcionarios pod¨ªan no conocer que su actuaci¨®n pudiera causar la muerte de Rueda. Ahora se?ala: "Los procesados conoc¨ªan que su actuaci¨®n pod¨ªa llegar a causar la muerte de la v¨ªctima". Esta precisi¨®n, que ha eliminado la atenuante de causar un da?o superior al deseado, es el motivo del aumento de petici¨®n de pena.

El fiscal pidi¨® una indemnizaci¨®n de ocho millones para los herederos de Rueda, y entre 125.000 y 150.000 pesetas para los presos lesionados.

El abogado de los herederos de Rueda pidi¨® 30 a?os para cada uno de los procesados por asesinato y otros delitos. Las otras acusaciones pidieron penas de 12 a?os por diversos delitos. Todos los abogados de la acusaci¨®n privada pidieron que se exijan tambi¨¦n responsabilidades a otros dos funcionarios, un m¨¦dico y un inspector de Instituciones Penitenciarias. Las defensas solicitaron la absoluci¨®n de los acusados.

Incidentes

En la sesi¨®n de la ma?ana, un centenar de miembros de CNT asistentes al juicio fueron desalojados por la Guardia Civil, despu¨¦s de que lanzaran gritos exigiendo justicia y levantaran carteles con fotograf¨ªas del preso fallecido. La intervenci¨®n del presidente del tribunal, Carlos Entrena, que no permiti¨® la lectura de dos pruebas documentales propuestas por las acusaciones, provoc¨® la ira de parte del p¨²blico, en su mayor¨ªa miembros de CNT, quienes llamaron asesinos a los procesados y preguntaron al tribunal si de verdad se iba a hacer justicia.Los expulsados de la sala recorrieron en silencio diversas dependencias del palacio de Justicia, portando carteles con las im¨¢genes del recluso torturado. Previamente, el tribunal hab¨ªa intentado sin ¨¦xito conciliar las posturas de los peritos forenses y m¨¦dicos que intervienen en el juicio.