El Sabadell sorprendi¨® al Madrid en los ¨²ltimos 23 minutos

El Sabadell no sab¨ªa lo que era marcar tres goles en la Nova Creu Alta, desde el 28 de diciembre de 1986. Ayer no era el D¨ªa de los Inocentes, pero se encontr¨® ante un rival que se pas¨® de listo o de inocente. El Real Madrid sigue en cabeza del Par¨ªs-Dakar del f¨²tbol espa?ol, pero el veh¨ªculo que conduce Leo Beenhakker necesita una revisi¨®n a fondo. El t¨¦cnico holand¨¦s lo sabe y ante las dunas que le esperan el pr¨®ximo s¨¢bado frente a la Real Sociedad, en el Santiago Bernab¨¦u, decidi¨® ayer cambiar algunas piezas, convencido de que la etapa copera de Sabadell no requer¨ªa material de lujo. Y la verdad es que los hechos iniciales estuvieron a punto de darle la raz¨®n, pero el rally futbol¨ªstico tambi¨¦n requiere concentraci¨®n y bastantes dosis de humildad.

Con Chendo y Michel en el banquillo y Gordillo y Butrague?o calentitos en su casa, el Real Madrid viaj¨® a Sabadell a cubrir el expediente ante un equipo tan pendiente como ¨¦l de su pr¨®ximo compromiso de Liga, pero con unas limitaciones que deb¨ªan de marcar la diferencia sobre el terreno de juego.

Esas limitaciones se pusieron de manifesto nada m¨¢s iniciarse el encuentro, cuando Hugo S¨¢nchez se encontr¨® con un regalo que acab¨® ofreciendo a los miles de seguidores madridistas, tras una doble pirueta circense. Mart¨ªn V¨¢zquez, menos espectacular que su compa?ero, hizo lo justo para que en la Nova Creu Alta se cantara el ya conocido "?Hala Madrid!" y m¨¢s de un seguidor del Sabadell se fuera a su casa aburrido antes de que comenzara el segundo tiempo. Y es que aquello ol¨ªa a goleada blanca y algunos no quer¨ªan estar presentes en la humillaci¨®n.

Ver para creer. Convencidos de que todo estaba m¨¢s que atado y bien atado, los hombres de Beenhakker se dedicaron a especular con el bal¨®n y a ofrecer un espect¨¢culo deprimente. Y el Sabadell, al que le faltan muchas cosas pero le sobra honradez profesional, se dedic¨® a empujarles hacia su ¨¢rea de una forma poco ortodoxa pero con la suficiente fuerza para demostrar las razones por las que algunos jugadores madridistas no suelen ser titulares.

Bast¨® que Vinyals inaugurara el marcador arlequinado para que el Madrid entrara en una fase de depresi¨®n nerviosa de la que no sali¨® hasta que finaliz¨® el encuentro. Nadie fue capaz de suministrar transilium a los jugadores madridistas ni nadie lo distribuy¨® por las gradas, que entraron en una locura colectiva al ver como Sala y Villarroya daban la vuelta a un marcador, en el que el casillero del Sabadell apenas se utiliza esta temporada.

Y para rematar la faena, hasta hubo la bronca habitual al ¨¢rbitro de turno que no sancion¨® una ca¨ªda de Periko Alonso, tras entrada de Camacho, dentro del ¨¢rea. Con tanto ¨¦xtasis pas¨® inadvertido el deb¨² del juvenil Aguil¨¢ en el Real Madrid, que naci¨® en el pueblo leridano de Almacelles y al que, posiblemente, Leo Beenhakker ten¨ªa previsto hacer jugar m¨¢s tiempo, quiz¨¢ para hacerle la pu?eta a su eterno rival -el Bar?a-, que busca jugadores hasta debajo de las piedras para renovar su plantilla.