El Congreso de Estados Unidos sella la sentencia de muerte de la 'contra'

El Congreso de Estados Unidos, por 219 votos frente a 211, firm¨® ayer la sentencia de muerte del ej¨¦rcito rebelde antisandinista, armado y financiado por la Agencia Central de Inteligencia (CIA) con la frustrada intenci¨®n de derrocar al r¨¦gimen de Managua. La votaci¨®n, que sigui¨® a m¨¢s de 10 horas de acalorado debate, constituye una humillaci¨®n sin precedentes para el presidente Ronald Reagan y abre la puerta de par en par a una soluci¨®n diplom¨¢tica del conflicto a trav¨¦s del plan de paz elaborado por el presidente de Costa Rica, Oscar Arias.

El desesperado llamamiento lanzado horas antes por Reagan no pudo evitar que los congresistas echaran por tierra su pretensi¨®n de conceder 36 millones de d¨®lares m¨¢s a la contra."El r¨¦gimen comunista de Managua no debe interpretar la acci¨®n de la C¨¢mara como una se?al que les permite retroceder en sus compromisos" democratizadores, advirti¨® ayer Reagan. El voto, estima el presidente de Estados Unidos, "socava los esfuerzos de esos bravos hombres y mujeres [de la contra] en un momento cr¨ªtico del proceso de paz de Centroam¨¦rica".

El presidente nicarag¨¹ense, Daniel Ortega, mostr¨® su satisfacci¨®n con la actitud de los legisladores estadounidenses -"una victoria para el pueblo de Nicaragua"- y tendi¨® una mano a EE UU para abrir un canal de di¨¢logo directo. No obstante, dej¨® bien claro que "la movilizaci¨®n y la guerra continuar¨¢n". Los siete a?os de actuaci¨®n de la contra se han cobrado ya 40.000 vidas.

Ocho votos de diferencia sirvieron para acabar con la principal obsesi¨®n de Reagan desde su llegada, en enero de 1981, a la Casa Blanca: derrocar a los sandinistas. Doscientos siete dem¨®cratas, aliados con 12 republicanos, volcaron a su favor la votaci¨®n, frente a los 164 republicanos y 47 dem¨®cratas que apoyaron la pretensi¨®n presidencial de mantener viva la llama rebelde.

La contra habr¨¢ de subsistir a partir de ahora mediante donaciones privadas, si bien los dem¨®cratas han anunciado ya su intenci¨®n de facilitarle ayuda humanitaria, que vendr¨¢ a sumarse a los 237 millones de d¨®lares que los contribuyentes norteamericanos han enterrado hasta ahora en la causa antisandinista. Todos en Washington est¨¢n interesados en evitar que los 15.000 luchadores por la libertad acaben inundando Estados Unidos como refugiados o creen problemas a Honduras, pa¨ªs fronterizo con Nicaragua en el que tienen establecidas sus bases.

El Gobierno espa?ol calific¨® ayer de "positiva" la votaci¨®n en el Congreso de EE UU.

"Es un serio rev¨¦s en nuestra lucha por la libertad y la democracia, pero seguiremos combatiendo", dijo con pesadumbre el dirigente contra Adolfo Calero. "Tenemos munici¨®n para dos meses m¨¢s, pero nuestra posici¨®n negociadora se ha debilitado", reconoci¨®.

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