"Por favor, escriban al Papa"
La restauraci¨®n de la Capilla Sixtina, que desde 1980 dirige el italiano Gianluigi Colalucci, sigue provocando airadas protestas de Estados Unidos. Un informe de m¨¢s de 100 p¨¢ginas dice: "?Va a continuar la destrucci¨®n?". El informe, firmado por el Comit¨¦ para la Salvaci¨®n de la C¨²pula de la Capilla Sixtina, concluye: "Por favor, escriban al Papa. A¨²n no es demasiado tarde para detener este terror¨ªfico asalto a la obra de Miguel ?ngel".Este verano, Colalucci particip¨® en un seminario en la universidad Men¨¦ndez Pelayo de Santander. Es un hombre t¨ªmido, apocado, que parece pedir perd¨®n por estar en contacto cada ma?ana con la obra cumbre de Miguel ?ngel.
Brealey, sin embargo, es serio, de car¨¢cter fuerte; parece capaz de aplastar de un plumazo lo que le perturbe. En una entrevista concedida a The New Yorker, declar¨®: "Los espa?oles son gente pol¨¦mica que disfruta con las discordias. (...) Hubo una protesta clamorosa en la Prensa [por la restauraci¨®n de Las meninas] y la gente me reconoc¨ªa en la calle y me se?alaba haci¨¦ndome sentir como una especie de criminal. En una ocasi¨®n, m¨¢s de 300 personas se empe?aron en entrar en el taller y tuvieron que sacarme por la puerta de atr¨¢s. Y, de repente, todo cambi¨®. Unas pocas personas influyentes salieron diciendo que el cuadro estaba quedando maravilloso. Me transform¨¦ en una especie de h¨¦roe; la gente se acercaba a besarme en la calle, lo que, para m¨ª, como ingl¨¦s, era a¨²n peor".
La personalidad del restaurador es valorada por Brealey de la siguiente manera: "Una vida dedicada a la restauraci¨®n, aunque tengas la suerte de hacer muchos trabajos, puede dejar una gran insatisfacci¨®n. Es una profesi¨®n mal pagada y peor valorada. Pero si amas la pintura, la obra que tienes delante es lo m¨¢s importante de tu vida. Cuando la vitalidad y el sexo mueren, los otros aspectos de la personalidad se ven afectados. Es entonces cuando el restaurador comienza a sentir sensaciones que no consiguen otras personas".
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.