El compromiso alcanzado por los 'doce' supone un impulso decisivo para la construcci¨®n europea

Los l¨ªderes comunitarios aprobaron el s¨¢bado, de madrugada, la reforma m¨¢s importante de la financiaci¨®n de la Comunidad Europea (CE) desde su fundaci¨®n, lo que permite a los doce abordar ahora en buenas condiciones el ambicioso proyecto de creaci¨®n del mercado interior europeo, previsto para 1992, y que deber¨ªa suponer un impulso decisivo para la construcci¨®n europea. Aunque tiene un car¨¢cter hist¨®rico, el compromiso alcanzado en la cumbre de jefes de Estado y de Gobierno de la CE celebrada en Bruselas no supone, sin embargo, un recorte dr¨¢stico del gasto agr¨ªcola, generado en gran parte por los excedentes, ni es tampoco seguro que permita a la Comunidad disponer de los recursos necesarios hasta dentro de cinco a?os.

Al t¨¦rmino de 28 horas de negociaci¨®n, el canciller alem¨¢n, Helmut Kohl, que preside este semestre, la CE, asegur¨¦ que "hab¨ªan dado a la Comunidad una s¨®lida base financiera". Pero su hom¨®logo espa?ol, Felipe Gonz¨¢lez, estim¨®, por su parte, que el nuevo techo de crecimiento impuesto al presupuesto comunitario, "dif¨ªcilmente podr¨¢ aguantar hasta 1992". "Estamos tranquilos para tres o cuatro a?os", a?adi¨®.A pesar de sus defectos, el pacto sellado en la capital belga ha puesto de relieve, en opini¨®n de los observadores, la voluntad de los l¨ªderes europeos de evitar la prolongaci¨®n de la crisis comunitaria y la moderada generosidad de los Estados miembros m¨¢s pr¨®speros, que, seg¨²n Felipe Gonz¨¢lez, son los que m¨¢s han cedido en la negociaci¨®n. Y la mejor prueba de ello es que la solidaridad de los ricos se manifestar¨¢ a los pobres mediante la duplicaci¨®n en seis a?os de los fondos estructurales (7.400 millones de ECU -1,03 billones de pesetas- en 1988).

Ni siquiera la primera ministra brit¨¢nica, Margaret Thatcher, acusada frecuentemente de desear transformar a la CE en una zona de libre cambio, se ha singularizado esta vez vetando una reforma que apenas daba satisfacci¨®n a su reivindicaci¨®n de reducci¨®n del gasto agr¨ªcola, pero que, dijo, permite lograr "nuestros principales objetivos".

No en balde el diario conservador brit¨¢nico The Daily Telegraph estim¨® ayer que Thatcher cedi¨® sobre el tema clave del presupuesto agr¨ªcola para facilitar un acuerdo sobre la financiaci¨®n". Para arrancar la concesi¨®n de la dama de hierro, la alianza franco-alemana funcion¨® plenamente y, despu¨¦s de haber obtenido la aceptaci¨®n por su hom¨®logo, Jacques Chirac, de su texto de compromiso, Kohl se esforz¨® en aislarla para poder echarle la culpa de antemano en un eventual fracaso e incitarla as¨ª a ceder.

Credibilidad internacional

"Una inspiraci¨®n se apoder¨¦ de algunos", afirm¨® el presidente Fran?ois Mitterrand, "y el Reino Unido adopt¨® una posici¨®n conciliadora". "Ha sido angelical", coment¨® el embajador de Espa?a, Carlos Westendorp. Adem¨¢s de sentar una sana base financiera, la reforma contribuye a otorgar a la CE una mayor credibilidad cuando se avecinan complicadas negociaciones en el marco del Acuerdo General de Aranceles Aduaneros y Comercio (GATT) y persiste la tensi¨®n en las relaciones comerciales con EE UU y Jap¨®n. "Hablaremos con una sola voz", enfatiz¨® Kohl, y empez¨® a hacerlo con una declaraci¨®n en la que los doce advert¨ªan ayer a las potencias agr¨ªcolas terceras que no intentasen sacar provecho para sus exportaciones de la disminuci¨®n de las subvenciones para la Europa verde.

Los pr¨®ximos Consejos Europeos a los que acudan los l¨ªderes europeos dejar¨¢n ahora de parecerse, como lamentaba Gonz¨¢lez, a "reuniones mixtas de los ministros de Agricultura y Hacienda", y sus asistentes podr¨¢n, por fin, dedicarse a profundizar la coordinaci¨®n de sus pol¨ªticas exteriores. Su primera tarea consistir¨¢, sin embargo, en junio, en Hannover, en esforzarse por eliminar los ¨²ltimos obst¨¢culos para la puesta en pie de un mercado ¨²nico que conllevar¨¢, sin duda, una formidable expansi¨®n econ¨®mica en Europa.