Los premios al cine catal¨¢n
UNA RECIENTE sentencia del Tribunal Supremo desestimando un recurso que present¨® el cincasta Jaime Camino contra la Generalitat de Catalu?a sienta criterios sobre algunos de los problemas que plantea la cooficialidad de lenguas en determinadas comunidades aut¨®nomas. La cuesti¨®n resid¨ªa en que la Generalitat excluye, para sus premios cinematogr¨¢ficos de fomento del cine catal¨¢n, las pel¨ªculas producidas por empresas locales cuyo estreno se efect¨²a en lengua castellana. Camino, que aspiraba a un galard¨®n para Dragon Rapide, consider¨® que esta cl¨¢usula supon¨ªa una discriminaci¨®n. El Supremo ha dictaminado que no tiene raz¨®n, pues si el objetivo de aquellas distin ciones es precisamente fomentar la utilizaci¨®n del ca tal¨¢n, que en el cine se halla en clara desventaja, la Generalitat, al concederlas, cumple con una obliga ci¨®n constitucional y estatutaria. La precariedad del catal¨¢n dentro del mundo cinematogr¨¢fico de Catalu?a es evidente: el a?o pasado se estrenaron en las salas comerciales ¨²nicamente 12 pel¨ªculas en'esta lengua. Mientras el proceso de normaIP zaci¨®n ling¨¹¨ªstica va equilibrando paulatinamente en Catalu?a la utilizaci¨®n de sus dos lenguas cooficiales en diversos ¨¢mbitos -como la vida oficial, la en¨¢efianza, la radio o la televisi¨®n-, dentro de un proceso que se caracteriza por una escasa conflictividad, el cine es, por la limitada dimensi¨®n del mercado interior, uno de los sectores donde la oferta es casi ¨²nicamente en castellano. En realidad, la capacidad de elecci¨®n de lengua se limita, en este terreno, a la oferta de lo que se emite por la peque?a pantalla. A la vista de ello resulta comprensible que la Generalitat despliegue una pol¨ªtica de est¨ªmulo que es independiente de las subvenciones que ya presta al cine como industria y que no se condicionan al aspecto finga¨ªstico.
La cuesti¨®n de fondo ante el Supremo era la de determinar si en una coexistencia de dos lenguas oficiales es discriminatoria cualquier medida que apoye tan s¨®lo a una de ellas. La sentencia establece que, dada la desigualdad en la situaci¨®n del castellano y el catal¨¢n en el cine que se produce en Catalu?a, una desigualdad puntual -como la que suponen esos premios institucionales- "es razonable". Y subraya que no cabe hablar de discriminaci¨®n -entendida como tratamiento desigual ante situaciones parangonables-, ya que si hay un mandato constitucional de fomentar la lengua catalana deben tomarse necesariamente medidas que la favorezcan, "lo que siempre ha de suponer un tratamiento desigual o desequilibrado que no tiene por qu¨¦ traducirse en el quebranto del derecho de igualdad". Seg¨²n el Supremo, esta pol¨ªtica no tiene por qu¨¦ efectuarse s¨®lo desde el Departamento de Normalizaci¨®n Ling¨¹¨ªstica, sino que la Generafitat puede realizarla tambi¨¦n desde su Direcci¨®n General de Cinematograf¨ªa El esp¨ªritu del fallo es, finalmente, el de que no hay discriminaci¨®n cuando se busca solucionar un desequilibrio mediante el fomento de la lengua m¨¢s d¨¦bil, y que, en todo caso, la injusticia ge producir¨ªa si se aplicaran medidas coercitivas contra la lengua dominante.
El ¨²nico aspecto espinoso que subyace en estos premios de la Generalitat es que la instituci¨®n no aclara la diferencia que existe entre cine catal¨¢n y cine en catal¨¢n, para se?alar a continuaci¨®n que con estos galardones lo que pretende fomentar es lo segundo. Es leg¨ªtimo considerar que hay un cine catal¨¢n en lengua castellana, al igual que una parte de la cultura catalana -de la hist¨®rica y de la actual- se ha expresaso o se expresa en castellano. Se trata de otra cuesti¨®n sobre la que existe pol¨¦mica, pero que no modifica la correcci¨®n de la sentencia que acaba de dictar el Supremo ante la demanda formulada por Jaime Camino.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.