El cient¨ªfico Wain Hobson cree que hay que cambiar la estrategia de vacuna contra el s¨ªndrome
Los investigadores deben plantearse una nueva estrategia de vacuna contra la llamada plaga del siglo XX, ha afirmado Wain Hobson, jefe del laboratorio de biolog¨ªa molecular de retrovirus del Instituto Pasteur de Par¨ªs y primer cient¨ªfico que determin¨®, en 1984, la estructura gen¨¦tica del virus del s¨ªndrome de inmunodeficiencia adquirida (SIDA). En opini¨®n del investigador, no han funcionado hasta ahora los m¨¦todos cl¨¢sicos para conseguir una defensa inmunol¨®gica contra esta enfermedad.De acuerdo con las explicaciones de Wain Hobson, a partir de 1990 podr¨ªan producirse importantes cambios en la investigaci¨®n sobre el SIDA. "La clave de la investigaci¨®n b¨¢sica", a?ade, "es llegar a entender la respuesta inmunol¨®gica del virus, porque de esta forma podremos influir tambi¨¦n en el sistema inmunol¨®gico del individuo".
Hobson, nacido hace 34 a?os en Londres y miembro del Instituto Pasteur desde 1980, hizo esta declaraci¨®n en el marco de las jornadas de animaci¨®n cient¨ªfica y t¨¦cnica organizadas por la Embajada de Francia en Espa?a y por el Instituto Franc¨¦s de Valencia en colaboraci¨®n con el Consejo Superior de Investigaciones Cient¨ªficas, entre otras instituciones. Las jornadas, que se prolongar¨¢n durante toda la semana, se inauguraron el lunes d¨ªa 15, y plantean debates sobre el SIDA, inteligencia artificial, el origen del universo e investigaciones agroalimentarias.
"Los primeros ensayos de vacuna han sido negativos. Se han fabricado de acuerdo con m¨¦to dos cl¨¢sicos, pero no han funcionado. Ahora hay que repasar la estrategia. Sucede algo parecido con la vacuna contra la gripe. El problema de los investigadores es que nos encontramos con un virus mutante". Seg¨²n Hobson, llegar a una vacuna eficaz es dif¨ªcil, pero no imposible. "Tenenios que ser optimistas, pero tambi¨¦n realistas. No hemos agotado todas las posibilidades, y ¨¦stas pueden venir con el cambio de estrategia". Hasta ahora no se han experimentado, al menos oficialmente, vacunas contra el SIDA en humanos.
Otro de los aspectos que preocupan a los investigadores es el de la aplicaci¨®n de f¨¢rmacos a los enfermos. "Por ahora no tenemos aspirinas que puedan aplicarse a combatir el SIDA, y los medicamentos a nuestro alcance tienen muchas contraindicaciones, pero existen razones para ser optimistas por los avances de la qu¨ªmica aplicada".
Hobson no se siente, sin embargo, muy optimista respecto al posible desarrollo de la enfermedad en los afectados. "Aunque el portador del virus es un enfermo potencial en un 0,5%, seg¨²n las estad¨ªsticas actuales, no podemos decir 'si tienes anticuerpos ya est¨¢s protegido'. El problema es que todav¨ªa no somos tan inteligentes como para crear el virus, y menos el del SIDA".
Al referirse a los or¨ªgenes de la enfermedad, Hobson ha se?alado que existen dos posibilidades: o que se trata de un virus inicialmente no pat¨®geno que vivi¨® en ?frica durante muchos a?os, que m¨¢s tarde se hizo pat¨®geno y que luego se propag¨® por Europa y el resto del mundo, o que el virus ha sido pat¨®geno siempre, aunque hab¨ªa sido combatido en ?frica por factores gen¨¦ticos hasta que su extensi¨®n se hizo incontrolable tras la II Guerra Mundial. El investigador se inclina por la primera posibilidad, aunque dice no contar con pruebas para mantener esta tesis.
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