P¨¦rez S¨¢nchez considera que la colecci¨®n Thyssen restar¨¢ espacio al Museo del Prado
"A m¨ª me satisface mucho que la colecci¨®n Thyssen venga a Espa?a, pero creo que por mantener ¨ªntegro ese importante conjunto privado estamos mutilando muy gravemente la colecci¨®n real de Espa?a", afirma Alfonso P¨¦rez S¨¢nchez, director del Museo del Prado, ante la posible exhibici¨®n del la colecci¨®n Thyssen en el palacio de Villahermosa, edificio integrante del complejo del Prado.
Las reticencias de Alfonso P¨¦rez S¨¢nchez respecto a la colecci¨®n de Heinrich Thyssen-Bornemisza s¨®lo afectan al espacio en el que se exhibir¨¢n estas obras, el palacio de Villahermosa, edificio dependiente del Museo del Prado, y al que P¨¦rez S¨¢nchez proyectaba llevar la pintura del siglo XVIII. El director de la primera pinacoteca espa?ola lamenta tener que partir ahora de cero en la b¨²squeda de un nuevo edificio para los mencionados fondos, especialmente despu¨¦s de un a?o en el que, seg¨²n asegura, todo ha estado paralizado en espera de la decisi¨®n del bar¨®n Thyssen-Bornemisza."Estoy absolutamente de acuerdo en la importancia de esta colecci¨®n, especialmente en lo que al arte contempor¨¢neo se refiere", aclara P¨¦rez S¨¢nchez. "Para un pa¨ªs como Espa?a, donde no hay colecci¨®n de arte contempor¨¢neo, poder disponer de un notable conjunto de obras que arrancan del impresionismo, como ocurre con esta colecci¨®n, debe ser algo celebrado por todos. En lo que toca al arte antiguo, tambi¨¦n hay un alto n¨²mero de piezas importantes. Pero hay tambi¨¦n obras que son interesantes en una colecci¨®n particular y que no son ni mejores ni peores que muchas que el Prado no tiene expuestas por falta de espacio".
El director del Prado no cree que la colecci¨®n Thyssen cubra algunas de las lagunas pict¨®ricas que sufre el Museo del Prado. "Evidentemente, la colecci¨®n consta de algunos importantes cuadros de pintura holandesa, el Quattrocento italiano, e incluso pintura alemana, del XVI, de las que hay carencia en esta pinacoteca. Si se integrasen en el Prado se cubrir¨ªan esas lagunas, pero no si se exhiben en un centro aparte. A nadie se le ocurre pensar que las piezas del Museo L¨¢zaro Galdeano, muchas de ellas important¨ªsimas, resuelven ausencias del Prado. Desde el punto de vista del p¨²blico, la exposici¨®n Thyssen ser¨¢ un fen¨®meno important¨ªsimo; otra cosa es el problema de espacio que se le crea al Prado. Si finalmente Villahermosa se le da a la colecci¨®n Thyssen tenemos que buscar, con absoluta urgencia, una soluci¨®n. Durante este ¨²ltimo a?o no han podido proseguir sus obras porque la oferta Thyssen ha bloqueado toda actividad".Vuelta a empezar
Alfonso P¨¦rez S¨¢nchez se?ala que el proyecto que albergaba para el palacio de Villahermosa estaba "anunciado hace tiempo y aprobado por el patronato. Siguiendo el viejo proyecto del profesor Diego Angulo, ser¨ªa el gran museo del XVIII, con Goya como eje central. Ahora nos vemos obligados a empezar desde el principio. A buscar un nuevo edificio, con el retraso en a?os que todo esto supone".
El patronato del Museo del Prado se reunir¨¢ el pr¨®ximo d¨ªa 22 para recabar informaci¨®n y buscar una salida a la falta de espacio de la pinacoteca. "Nos retrotraemos al mismo punto en el que est¨¢bamos en 1985. El peligro est¨¢ en que entremos en un dique seco sin soluci¨®n a la vista. Se han fijado en Villahermosa cuando hab¨ªa otros lugares muy atractivos. Por ejemplo, el palacio Real. Nadie se ha fijado en la enorme cantidad de espacio sin utilizar que hay en ese edificio. O en Boadilla del Monte, tan cerca de Madrid".
La mayor preocupaci¨®n actual de Alfonso P¨¦rez S¨¢nchez es la merma de espacio que desde hace 12 a?os sufre el Prado. "El museo ha ido mejorando sus infraestructuras aumentando el n¨²mero de conservadores, restauradores, personal de oficina, etc. El espacio que todo esto requiere se ha obtenido restando espacio a la zona de exposiciones. Hoy el Prado exhibe muchas menos pinturas que en 1976. Si ma?ana se terminan las obras y ocupamos todas las salas de exposiciones, habr¨¢ muchas menos obras colgadas que en 1976. En total hemos perdido 18 salas", explica sobre un plano, "de exposici¨®n. Y recuerde que antes ten¨ªamos muchas m¨¢s pinturas colgadas porque se ocupaban los pasillos y escaleras y porque los cuadros se exhib¨ªan con menos lujo de espacio del que ahora requieren".
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