La defensa psicol¨®gica
Los periodistas suecos se entrenan para mantener la libertad de prensa en caso de guerra
En caso de no poder operar desde Estocolmo en una situaci¨®n b¨¦lica, la agencia central de noticias suecas (TT) tiene previsto trasladar sus oficinas centrales a un lugar secreto en el campo, donde cuenta con las instalaciones suficientes par seguir funcionando. Estos planes, dentro del concepto de defensa total, forman parte de lo que en Suecia se llama defensa psicol¨®gica, cuya base, dicen las autoridades, es la libertad de opini¨®n y la informaci¨®n correcta. La Direcci¨®n Nacional para la Defensa Psicol¨®gica, integrada por civiles y dependiente del Gobierno, se encarga de coordinar estas actividades, en manos de civiles. La defensa psicol¨®gica tiene como objetivo "mantener y reforzar la voluntad de resistir en tiempo de guerra y contrarrestar la propaganda enemiga". Se trata, ante un conflicto b¨¦lico, de asegurar una "informaci¨®n r¨¢pida, ver¨ªdica y completa", en un mundo en el que los medios de comunicaci¨®n han crecido en importancia y ser¨ªan uno de los primeros objetivos de un invasor. Por ello, su defensa, para los suecos, tambi¨¦n resulta crucial.
Los periodistas asignados a estos servicios se entrenan regularmente en este tipo de ejercicios. El plan, explica Roland Nordlund, jefe del departamento de investigaci¨®n de la direcci¨®n, es no establecer ninguna censura, "aunque, naturalmente, los medios de comunicaci¨®n tienen que tener cuidado con lo que publican, para no dar al enemigo informaci¨®n da?ina". No obstante, seg¨²n una persona de la radio sueca, s¨ª se aplicar¨ªa la censura a los periodistas extranjeros que mandaran noticias desde Suecia. Y los censores en este caso ser¨ªan informadores suecos, que se entrenan para ello.
"Pero en tiempo de guerra es importante que la gente est¨¦ bien informada y r¨¢pidamente, aunque las noticias no sean buenas. De otro modo se crea un campo propicio a ser abonado por la propaganda Y los rumores", a?ade Nordlund. Y afirma: "No somos una organizaci¨®n de propaganda". La defensa psicol¨®gica tambi¨¦n incluye el informar a los soldados extranjeros que en caso de guerra entren en territorio sueco.
La Direcci¨®n Nacional de la Defensa Psicol¨®gica es una peque?a organizaci¨®n en tiempo de paz, cuando cuenta con una decena de personas. En tiempo de guerra, sin embargo, varios centenares de periodistas, expertos y relaciones p¨²blicas y otros profesionales trabajar¨ªan en la defensa psicol¨®gica.
Una de las funciones de esta direcci¨®n es la de organizar pr¨¢cticas con los periodistas con vistas a posibles conflictos. Estas maniobras period¨ªsticas var¨ªan seg¨²n los escenarios que se contemplan. En ellas se llevan a cabo entrevistas con autoridades y redacci¨®n de noticias de la supuesta guerra. Los programas o informaciones resultantes no se emiten -salvo en alguna ocasi¨®n- ni se publican.
"La gente cree que los periodistas en una guerra ser¨ªan tan cr¨ªticos como en tiempo de paz. Pero no es verdad. En las pr¨¢cticas de defensa psicol¨®gica se muestran muy cautos, practican la autocensura y a menudo tenemos que impulsarles a contar cosas que ellos consideran que no habr¨ªa que revelar", comenta Nordlund. La defensa psicol¨®gica intenta tambi¨¦n basarse sobre la comunidad local. Pero a veces los periodistas locales son m¨¢s cautos en su informaci¨®n que los que vienen de afuera, seg¨²n Nordlund, para el cual "la relaci¨®n personal con la. amenaza se refleja en la labor informativa".
Emisoras port¨¢tiles
Un centro de prensa en un lugar mantenido secreto ser¨ªa abierto en caso de guerra para que los periodistas pudiesen entrar en contacto con los representantes del Gobierno y de las autoridades locales.
En estos planes, la radio, por ser rapida y directa, toma una gran importancia. La Corporaci¨®n Sueca de Emisiones, entidad independiente en tiempo de paz, pasar¨ªa a depender del Gobierno en tiempo de guerra, y hay planes y medidas para que radio y televisi¨®n puedan seguir emitiendo.
Se pone un especial ¨¦nfasis en las radios locales (que s¨®lo existen en Suecia desde 1977), equipadas con emisoras port¨¢tiles.
Hay acuerdos especiales con imprentas para garantizar que al menos algunos diarios seguir¨¢n public¨¢ndose. As¨ª, y ante la poca seguridad en caso de guerra de los sistemas informatizados, varios diarios que se han modernizado han conservado sus viejas linot¨ªpias e imprentas con vistas a cualquier eventualidad.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
?Tienes una suscripci¨®n de empresa? Accede aqu¨ª para contratar m¨¢s cuentas.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.