El mercado no logra atraer compradores

Los mercados de valores han continuado con sus vacilaciones ante un futuro que se les presenta cada d¨ªa m¨¢s complicado. La inactividad sigue siendo lo m¨¢s destacado de estas sesiones, lo cual tiene cierta l¨®gica, pues el mercado no ofrece alicientes ni para comprar ni para vender. No est¨¢ clara la trayectoria a corto y medio plazo, y tampoco la acumulaci¨®n de plusval¨ªas -cuando las hay- es una tentaci¨®n, lo que convierte a los corros en un ritual vac¨ªo y aburrido.La sesi¨®n ha supuesto un c¨²mulo de altibajos de poca importancia debidos, precisamente, a la falta de presi¨®n de papel y dinero. El volumen negociado volver¨¢ a situarse en torno a los 7.000 millones de pesetas, aunque s¨®lo una peque?a parte de esa cifra habr¨¢ influido en la formaci¨®n de los precios debido al elevado n¨²mero de aplicaciones que se ejecutan cada d¨ªa.

Ni siquiera los sectores industriales han conseguido mantener una l¨ªnea parecida en su comportamiento, pues, mientras que alimentaci¨®n y construcci¨®n registran avances superiores a los dos puntos, las qu¨ªmicas bajan y las sider¨²rgicas apenas se mueven, todo ello con las consiguientes diferencias dentro de cada grupo.

Banca y comunicaciones han conseguido mantenerse al alza, aunque en el primer caso se ha debido exclusivamente al esfuerzo particular de Bilbao y Vizcaya, pues el resto de los valores se limit¨® a repetir o a ceder posiciones. Tras el anuncio de fusi¨®n de las filiales de estos bancos, quedaron suspendidas de contrataci¨®n las acciones de Indub¨¢n por parte de la Bolsa de Madrid, manteni¨¦ndose la cotizaci¨®n de Banca Catalana en Barcelona.

Las posiciones al cierre eran vendedoras, aunque empieza a ser tradici¨®n el no airear el papel y esperar a que sean los compradores los que acudan al quite.