M¨¢s de 25 millones y ocho meses de condena a un MIR anestesista por imprudencia temeraria

La Audiencia Provincial de Le¨®n ha condenado a ocho meses de prisi¨®n al m¨¦dico Juan Manuel Vaca Miguel, por un delito de imprudencia temeraria con resultado de lesiones graves en la paciente Humildad del Blanco Rodr¨ªguez, de 40 a?os. El fallo fija una indemnizaci¨®n de 25 millones de pesetas por secuelas y datos morales as¨ª como el pago de 3.388.000 pesetas, 419.000 bol¨ªvares, y 9.300 d¨®lares en concepto de gastos m¨¦dicos generados tras la estancia de la enferma en varios centros m¨¦dicos de Le¨®n, Venezuela y Estados Unidos.Tambi¨¦n ha sido condenada la Diputaci¨®n de Le¨®n a abonar las indemnizaciones como responsable civil subsidiaria al formar parte el procesado del personal laboral de la instituci¨®n. Humildad del Blanco ingres¨® el 7 de septiembre de 1985 en el servicio de urgencias del hospital Princesa Sof¨ªa para ser intervenida de un sencillo abceso perianal.

Juan Manuel Vaca, m¨¦dico interno residente (MIR) que trabajaba en el centro desde hac¨ªa tres meses en el servicio de anestesia procedi¨® a anestesiar a la paciente en ausencia del m¨¦dico titular, Antonio Pelegr¨ªn, que se encontraba "localizado" en casa.

Una insuficiencia respiratoria, derivada de un espasmo de glotis producido por la aplicaci¨®n de la anestesia, provoc¨® un coma profundo en la enferma. Tras una ligera recuperaci¨®n, a los cuatro d¨ªas las secuelas se manifestaron irreversibles. Humildad del Blanco, con una tetraplejia que le afecta a las cuatro extremidades, tronco, cuello y movilidad oro-facial, tan s¨®lo emite unos leves sonidos sil¨¢bicos y necesita de una persona que la atienda permanentemente en sus funciones vitales m¨¢s elementales. Su estado se califica de invalidez total,

El fiscal rebaj¨® en sus conclusiones definitivas la petici¨®n de cinco a?os de prisi¨®n a dos a?os, mientras que el agravante de imprudencia profesional, ha sido desestimado por entender que el MIR procesado estaba en per¨ªodo de aprendizaje.

Durante el juicio, celebrado el pasado d¨ªa 24, qued¨® probado que la organizaci¨®n del hospital era "deficiente" y no fu¨¦ casual que un MIR asistiera al enfermo, y por lo tanto no se pod¨ªa responsabilizar en solitario del suceso teniendo en cuenta "el abuso que se hac¨ªa de los MIR", seg¨²n fuentes de la audiencia. En la sentencia se estima que influy¨® "el ambiente de incumplimiento de la normativa sobre guardias y servicios".