Biof¨¢rmacos de final de siglo

En 1996 la industria de los biof¨¢rmacos alcanzar¨¢ la respetable cifra de un bill¨®n y medio de pesetas, seg¨²n estimaciones de expertos norteamericanos. "Esto es s¨®lo un indicio de la importancia que ya se le est¨¢ dando a este tema", se?ala Otilio Fern¨¢ndez, ingeniero industrial y economista que abandon¨® una direcci¨®n general de un ministerio "para tratar de hacer llegar a m¨¢s personas los hallazgos de un hombre sabio como es Gregorio Ram¨®n Cebri¨¢n". Y lo est¨¢ haciendo a trav¨¦s del grupo cient¨ªfico-empresarial Inagrosa-LBE, que ya ha suscrito varios convenios de colaboraci¨®n con distintas universidades espa?olas y extranjeras y que participa en proyectos de biotecnolog¨ªa de la Comunidad Europea.Uno y otro comparten la teor¨ªa de que la humanidad camina hacia los biof¨¢rmacos que ya han comenzado a construir se mediante la ingenier¨ªa biol¨®gica. "Partimos del principio de que la naturaleza es la madre sabia que no podemos cambiar, pero podemos completarla. Nuestra tecnolog¨ªa biol¨®gica es neutral porque respeta el equilibrio biol¨®gico y las leyes de la naturaleza", dice Otilio Fern¨¢ndez. Ram¨®n Cebri¨¢n comparte plenamente esta teor¨ªa, pero todav¨ªa es m¨¢s radical cuando afirma que el ser humano solamente necesita entre 12 y 16 f¨¢rmacos. "Los dem¨¢s medicamentos deber¨ªan ser arrojados al r¨ªo", asegura.

Avance de 10 a?os

Sus hallazgos sobre amino¨¢cidos pueden haber dado un avance de al menos 10 a?os en la llamada revoluci¨®n bioindustrial, seg¨²n opiniones de algunos expertos. Desde esta perspectiva se est¨¢n desarrollando nuevos nutrientes, correctores, bioinsecticidas, etc¨¦tera, para agricultura, y otros productos para ganader¨ªa, farmacia y cosm¨¦tica, basados en el empleo de amino¨¢cidos puros y biol¨®gicamente activos y microorganismos especialmente seleccionados.Se espera que con las nuevas t¨¦cnicas de la ingenier¨ªa gen¨¦tica ser¨¢ posible obtener estos productos libres y con alta pureza. Gregorio Ram¨®n Cebri¨¢n ha conseguido establecer la forma de obtener estos productos -amino¨¢cidos- por v¨ªas paralelas siguiendo los procesos de los seres vivos. Su obtenci¨®n en un proceso industrial s¨®lo ha sido posible, sin embargo, cuando se ha llegado a disponer de otros avances en otras tecnolog¨ªas como la electr¨®n?ca (microprocesadores y dispositivos de muy alta sensibilidad) y la ingenier¨ªa proteica.

Para conseguir estos productos a partir de la f¨®rmula descubierta por Gregorio Ram¨®n Cebri¨¢n se cuenta con un proceso totalmente autom¨¢tico que tiene varias l¨ªneas de reactores controlados por ordenadores de muy alta velocidad de proceso y el empleo de biomol¨¦culas para proteger a los amino¨¢cidos libres una vez extra¨ªdos de los reactores.