Temor a que se pierda el norte

P. ?Cu¨¢l fue su reacci¨®n al saber que hab¨ªa sido dictado auto de procesamiento contra el n¨²mero dos de su Gobierno?

R. A nadie le gusta que se produzcan fen¨®menos que obliguen a un miembro del Gobierno o de la Administraci¨®n a tomar la decisi¨®n de abandonar. De todas formas, la resoluci¨®n fue r¨¢pida y a las 48 horas estaba funcionando el Gobierno. Creo que es una demostraci¨®n de esa fluidez entre los partidos que lo componen, de que por encima de todo est¨¢ el inter¨¦s en que las cosas se hagan. Ha habido muchas opiniones sobre esos acontecimientos, pero ninguna merma en la capacidad de actuaci¨®n del Gobierno.

P. "Laxe pide al Ap¨®stol lo que no exige a Madrid", titulaba un diario cuando usted actu¨® de delegado regio en la ofrenda a Santiago. ?Cree que hay una sinton¨ªa con el Gobierno de la naci¨®n en esos objetivos?

R. El grado de colaboraci¨®n entre los dos Gobiernos es importante y suficiente, pero deber¨ªa serlo m¨¢s. Desde Galicia se ve con cierta preocupaci¨®n que Espa?a bascule hacia el Mediterr¨¢neo y se pierda el horizonte de la cornisa cant¨¢brica y la fachada atl¨¢ntica, que han sufrido fuertes crisis en su industria sider¨²rgica y naval, en su ganader¨ªa, en los ¨²ltimos a?os. Ello debe obligar a los Gobiernos auton¨®micos y al Gobierno central a un mayor ¨¦nfasis inversor.

P. ?Qu¨¦ impresi¨®n le produce tener que enfrentarse en las urnas dentro de un a?o con un pol¨ªtico popular y experimentado como Manuel Fraga?

R. Fraga intenta amedrentar a los gallegos con su venida. Su postura es el catastrofismo, repetir hasta la saciedad que tanto Galicia como Espa?a est¨¢n muy mal, cuando los indicadores demuestran lo contrario. No lo digo yo; este verano han coincidido personalidades pol¨ªticas, que nada tienen que ver con mi partido o mi Gobierno, en que a Galicia no le hacen falta mes¨ªas. Por otra parte, los esfuerzos de Fraga para con Galicia est¨¢n por ver, porque no ha hecho nada siendo o no ministro. Y lo que nunca puede hacer un pueblo es dar marcha atr¨¢s, volver al pasado. El pasado no ha sido halag¨¹e?o para Galicia.

P. ?Le parece plausible que en sectores progresistas del resto del Estado se d¨¦ una cierta complaciencia con la candidatura de Fraga, como si se le confinase en Galicia?

R. ?l mismo ha optado por esa v¨ªa, y creo que si tuviese posibilidades de escaparse, lo har¨ªa. Pero a m¨ª lo que me preocupa es la sociedad gallega y qu¨¦ soluciones hay que darle, porque estoy convencido de que lo que se haga en estos a?os determinar¨¢ o no su despegue, y me importa porque me considero casado, matrimoniado con ella.