Aplazado hasta el a?o que viene el juicio a los dirigentes de Acci¨®n Directa

El juicio contra los principales dirigentes del grupo terrorista franc¨¦s Acci¨®n Directa, que deb¨ªa iniciarse ayer en Par¨ªs, fue aplazado hasta el a?o que viene a causa de la huelga de funcionarios de prisiones, que se prolonga ya durante 11 d¨ªas. El paro de los funcionarios impide los traslados de presos a los juzgados y dificulta las comunicaciones de los abogados con sus clientes para preparar las vistas.

Jean-Marc Rouillan, Nathalie M¨¦nigon, Georges Cipriani y Joelle Aubron, los ocupantes del banquille de los acusados, est¨¢n procesados por el asesinato de Georges Besse, el presidente de la R¨¦gie Renault acribillado frente a su domicilio parisiense el 17 de noviembre de 1986. Las dos mujeres, Nathalie y Joelle, est¨¢n consideradas las autoras materiales del asesinato, mientras que Rouillan y Cipriani deben responder a la inculpaci¨®n de complicidad.Acci¨®n Directa, organizaci¨®n fundada por Roulllan y M¨¦nigon a mediados de los a?os setenta, no se responsabiliz¨® del atentado hasta tres meses despu¨¦s. En el comunicado, los terroristas acusaban a Besse, de 58 a?os, especializado en reflotar empresas, de "encarnar el puesto preponderante del sector p¨²blico industrial en la estrategia imperialista de concentraciones industriales y tecnol¨®gicas".

Diez d¨ªas despu¨¦s de la reivindicaci¨®n, el 19 de febrero de 1987, una espectacular operaci¨®n policial acab¨® con la detenci¨®n de los cuatro terroristas, dedicados a inofensivas tareas ecologistas en una granja de Vitryaux-Loges. Roulilan, el ide¨®logo,y su compa?era Nathalie, la activista, criaban animales y practicaban la observaci¨®n de las aves en la casa de campo, a la que acud¨ªan regularmente de visita dos amigos, Joelle Aubron y Georges Cipriarti. A la hora de la cena, 15 polic¨ªas sorprendieron a los cuatro sentados a la mesa. La ¨²nica reacci¨®n fue un comentario de Rouillan: "Ser detenido as¨ª produce estr¨¦s".

Al juicio, cuya duraci¨®n prevista es de una semana, comparecer¨¢n unos 40 testigos. Dos de ellos son clave para identificar a los acusados: un transe¨²nte que presenci¨® la huida de una persona rubia poco despu¨¦s del asesinato y un agricultor vecino de la granja de Vitry.

Una peluca rubia que tal vez perteneci¨® a Cipriani fue encontrada por la polic¨ªa en la granja donde los acusados fueron detenidos.