Pol¨¦mica a cuatro bandas

Como hispanistaextranjero que desde los principios de los setenta viene comentando las obras de La¨ªn y Castilla del Pino, entre otros, me ha llamado la atenci¨®n la reciente pol¨¦mica entre estos escritores sobre el problema del biling¨¹ismo en Catalu?a. En mi opini¨®n, en ninguno de los escritos anteriores de estos ilustres representantes del pensamiento de posguerra se ha dado con perfiles tan claros la diferencia radical entre dos modos de pensar que dominaban (y por lo visto siguen vigentes) el ensayo filos¨®fico durante el franquismo.

Quien haya seguido la evoluci¨®n del pensamiento espa?ol de posguerra se queda estupefacto ante el hecho de que sea La¨ªn el que tenga que recordarle al marxista Castilla que los problemas del biling¨¹ismo, como los del hambre de Centroam¨¦rica, de Oriente Pr¨®ximo..., no son problernas puramente mentales, sino reales.

Pero lo que resulta a primera vista divertido y curioso es que los papeles se hayan trocado. Porque por extra?o que parezca, que Castilla vea los problemas como mentales, y La¨ªn como concretos, es lo normal, aunque nada evidente, y compatible con las posturas que ambos vienen protagonizando en la vida intelectual espa?ola.

En el proceso de razonamiento en las ideolog¨ªas liberales y marxistas se da la iron¨ªa sugerida ya por K. Marinheim y los te¨®ricos de la nueva ret¨®rica de que son los pensadores revolucionarios los que tienden a emplear argumentos abstractos, mientras que los conservadores recurren a ejemplos concretos. Un intelectual dedicado al imperativo del debe ser, entusiasta de cambios radicales, no respeta -he aqu¨ª la iron¨ªa- los dictados y limitaciones de esa misrna realidad social que pretende acatar, ya que en teor¨ªa, en lo mental, todo es posible.

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Por otra parte, la mentalidad liberal-conservadora m¨¢s apegada a los hechos y a las constantes de la naturaleza humana, tal como la experiencia las viene confirmando, busca la compatibilidad y la armon¨ªa en las relaciones humanas (ya lo hab¨ªa dicho Tierno) y no proyecta su visi¨®n social m¨¢s all¨¢ de lo que las condiciones en que se encuentra acreditan como practicables. . Catedr¨¢tico de Literatura Espa?ola.