El Supremo confirma una sentencia de la Audiencia de Barcelona que absolvi¨® a cinco acusados de violar a una joven

El Tribunal Supremo ha desestimado el recurso presentado por C. B. P., una joven de 25 a?os, contra una sentencia de la Audiencia de Barcelona que absolv¨ªa a los cinco acusados de haberla violado al considerar que no existi¨® delito porque no se prob¨® la intimidaci¨®n y fuerza sobre la v¨ªctima. El Supremo no ha entrado en el fondo de la cuesti¨®n, sino que ha rechazado el recurso por defecto de forma, ya que se plante¨® invocando un art¨ªculo inadecuado.

El alto tribunal condena a la recurrente al pago de las costas del procedimiento.El 11 de octubre de 1985 la Secci¨®n Segunda de la Audiencia de Barcelona absolv¨ªa a Miguel ?ngel Langa, Ricardo Ram¨®n Duria, Manuel Bandet Garc¨ªa, Clemente Calle Hidalgo y Jorge Colomo Monle¨®n, todos ellos juzgados por sendos delitos de violaci¨®n.

Los hechos ocurrieron en la madrugada del 3 de septiembre de 1983 en la calle de Larrad, en Barcelona. ?ste es el ¨²nico extremo en el que coinciden la sentencia dictada y la versi¨®n mantenida por la v¨ªctima. C. B. P., casada y madre de una ni?a, sostuvo en la vista oral que fue amenazada por los cinco j¨®venes, que esgrimieron una navaja y la obligaron a realizar el coito sucesivamente con cada uno de ellos en los bancos del parque G¨¹ell. Uno de los acusados le arrebat¨® el bolso y se apoder¨® del dinero que llevaba. El tribunal de Barcelona no dio cr¨¦dito a la versi¨®n de la mujer y en la sentencia precisaba que no hab¨ªa constancia de que hubiera sido objeto de fuerza o coacci¨®n. El tribunal estim¨® la versi¨®n de los procesados, que admitieron haber mantenido relaciones sexuales con la mujer, pero con el consentimiento de ella.

El fallo subrayaba, adem¨¢s, que para admitir un delito de violaci¨®n ten¨ªa que demostrarse la intimidaci¨®n o fuerza hacia la v¨ªctima y, por parte de ¨¦sta, "la necesaria resistencia que debe ser real, continuada, seria y verdadera, no convencional, fingida o simulada". El requisito de probar la resistencia de la mujer a la agresi¨®n sexual ha sido modificado, posteriormente, en una sentencia del Supremo. Los magistrados de Barcelona entendieron, por el contrario, que "de lo actuado aparece claramente la voluntad decidida de la v¨ªctima ( ... ) de yacer con los procesados".

C. B. P. recurri¨® la sentencia ante el Supremo con la confianza de que ese tribunal admitir¨ªa su versi¨®n y condenar¨ªa a sus presuntos agresores. Sin embargo, el recurso ha sido desestimado por defecto de forma.